Una vez más Trelew amanecía sin transporte, una vez más provocada por el empresario Febrero, de la línea 22, que paralizó el servicio urbano de colectivos para imponer sus condiciones al gobierno municipal del peronista Maderna. El pueblo trabajador pagaba, otra vez y van, en estos 7 años de servicios en la ciudad, la sed de ganancia de los empresarios.
Se registraron intensas negociaciones durante toda la tarde y cerca de las 22:00, según anunciaron los medios locales, se logró destrabar la posición de la empresa, que salió en rechazo de la prórroga anunciada por el Municipio hasta el 10 de diciembre de un contrato vencido y cuya prórroga de siete años venció este mes.
El titular de la empresa, Adrián Febrero, y el secretario de gobierno, Norberto Yauhar, llegaron a un acuerdo este martes a la noche. Las unidades EL 22 volverán a funcionar con normalidad. El impasse dura hasta este viernes. Entonces las partes volverán a sentarse para negociar una extensión del contrato hasta noviembre
Primero una curiosidad, no hay balances públicos de la 22 desde hace 7 años.
¿A dónde va toda la guita de los subsidios que le paga el gobierno provincial y nacional a los empresarios de la 22? A sus bolsillos. Los recorridos son exclusivos para la empresa, convirtiendo a los pasajeros en clientes cautivos de los empresarios.
Como planteó el candidato a intendente del PTS en el Frente de Izquierda Unidad, Martín Saez: “habría que investigar a dónde fueron todos los subsidios que han recibido estos años, porque no se ve que haya mejorado notablemente la calidad del transporte público en la ciudad, sino todo lo contrario”. También dijo que el servicio de colectivos “debería ser totalmente estatal y controlado por los trabajadores, organizando el recorrido con participación de los vecinos. ¿Quién sabe cómo funciona el servicio? Los trabajadores y los usuarios, saben cuáles son los problemas que enfrentan cotidianamente”.
Los verdaderos ganadores de la crisis
En un momento muy crítico del país, con la mitad de la población bajo la pobreza, considerando que en el último mes hubo una suba de la inflación del 6,5% y una inflación anual del 102,5%. Y a pesar de sus grandes fortunas, estos días vimos como las patronales del transporte de colectivos presionaron y lograron que aumente el boleto.
Más inflación, menos alcanza el sueldo. Usuarios y trabajadores pagan los costos de su sed de ganancias, pasajeros y colectiveros están llamados a ver quiénes son sus amigos y quiénes sus enemigos.
Para el PTS-FIT, un servicio público como el transporte urbano de pasajeros debería estar controlado por choferes y usuarios, que sean ellos los que fiscalicen los ingresos, definan cuánto debe costar el boleto, qué se hace con los subsidios, planifiquen los recorridos y garanticen la inversión en el sector para mejorar la calidad de las unidades.
“Sabemos que los empresarios y el gobierno se van a oponer, por eso, hay que organizar la fuerza social de la clase trabajadora para pelear por este tipo de medidas de control y una salida de fondo que sería conquistar la estatización del servicio”, sostuvo el docente y candidato a Intendente del PTS-FIT, Martín Saez.
La izquierda discute abiertamente que los trabajadores y trabajadoras, en unidad con el pueblo pobre, podemos darle una salida a la crisis y que la crisis la paguen los capitalistas. Porque nuestras vidas valen más que sus ganancias. Una salida que solo puede surgir desde abajo. Ese es el aporte que buscamos hacer con La Izquierda Diario. |