Tras la aprobación de la reforma previsional por decreto, las direcciones sindicales han optado por convocar una nueva jornada de huelga el jueves 23 de marzo, una semana después. Una fecha totalmente desfasada frente a la bronca y las tendencias a la radicalización que se han expresado en toda Francia mediante manifestaciones espontáneas y bloqueos desde que la decisión antidemocrática del gobierno. Por eso, varios sindicatos han optado por no esperar al 23 de marzo, convocando una huelga a partir del lunes 20 de marzo.
Se endurece la huelga en las refinerías, ¿le seguirán otros?
Nada más anunciarse el decreto 49-3, los huelguistas de la refinería de Normandía, que se encuentran en huelga desde el 7 de marzo, votaron el cierre de las instalaciones. Un "punto de no retorno" para la mayor refinería de Francia, con la paralización total de las actividades de refinado.
En Donges, la CGT anunció la reanudación de la huelga hasta el 24 de marzo, mientras que el depósito de combustible vecino estaba en huelga desde el 16 de marzo.
En la refinería Petroineos de Lavera, cerca de Marsella, Sébastien Varagnol, delegado de la CGT, anunció que "los envíos de combustibles están parados, y este fin de semana estamos preparando la parada total de las instalaciones", que deberían dejar de funcionar "el lunes por la tarde a más tardar".
Tras la huelga en la Compagnie Industrielle Maritime de Le Havre, la refinería ExxonMobil de Gravenchon también está a punto de cerrar por falta de crudo para refinar.
En el sector energético, las huelgas de renovables continúan la próxima semana
En el sector del gas, las tres terminales Elengy de Fos Tonkin, Fos Cavaou y Montoir siguen bloqueadas, mientras que la huelga se renovó este viernes hasta el 21 de marzo. Según el diario Le Parisien, el bloqueo se mantiene desde el 7 de marzo en los once almacenamientos subterráneos de gas de la empresa Storengy. La dirección del establecimiento más grande, situado en Chémery (Loir-et-Cher), se vio obligada a cerrar las válvulas el viernes.
En las centrales nucleares, la CGT declara que, desde este viernes, "no se han levantado los piquetes, al contrario, se han prolongado", con descensos de producción que oscilan entre 15.000 y 20.000 MW desde hace una semana. En la central de Chinon, entre 100 y 200 huelguistas se reunieron en asamblea general el jueves y votaron casi por unanimidad continuar la huelga hasta el lunes 20 de marzo. La central nuclear de Golfech (Tarn-et-Garonne) también está afectada, mientras que las centrales hidroeléctricas de Pied de Borne (Lozère) y La Bathie (Savoie) están en huelga.
En cuanto a la distribución eléctrica, varios centros de la empresa Enedis continúan en huelga, sobre todo en la región parisina. En Oise, algunos empleados de la empresa decidieron "pasar a la acción" con más dureza bloqueando su centro inmediatamente después del anuncio del decreto 49-3. En Toulouse, los empleados de Enedis, que mantienen un piquete desde el 6 de marzo, siguen bloqueando uno de los centros de la empresa y han votado renovar el movimiento este viernes.
CGT Puertos convoca a parar a principios de semana
Tras el 49-3, la CGT Puertos convoca una nueva huelga de 72 horas a partir del martes 21 de marzo, con una operación que llaman "puerto muerto" el miércoles 22 de marzo. La semana pasada, los principales puertos franceses ya habían visto su tráfico perturbado por la huelga, con la paralización total de los puertos de Nantes-Saint-Nazaire, Brest, Le Havre, Marsella-Fos y Calais el jueves 16 de marzo, en el marco de las jornadas de "puertos muertos" lanzadas por la Federación Nacional de Puertos y Muelles de la CGT. En Le Havre, los remolcadores, que aseguran la salida y llegada de los buques, también están en huelga desde el viernes.
En los transportes, continúa la huelga en la SNCF, con vuelos cancelados en los aeropuertos
En la empresa ferroviaria estatal SNCF, cuatro sindicatos (CFDT, CGT, UNSA y Sud-Rail) llamaron el viernes 17 de marzo a "mantener la huelga". En París, Lyon y Toulouse, los ferroviarios reunidos en Asambleas Generales votaron el viernes 17 de marzo la renovación de la huelga.
En los aeropuertos, la Dirección General de Aviación Civil (DGAC) pidió a las compañías aéreas que anularan el 30% de sus vuelos en París-Orly y el 20% en Marsella-Provenza previstos para el lunes 20 de marzo, debido a la huelga de controladores aéreos. Una tasa de anulación superior a la de esta semana, lo que demuestra un endurecimiento del movimiento tras el 49-3.
Continúa la huelga de los recolectores de residuos en París y otras regiones
En París, a pesar de las requisas de trabajadores, la huelga de basureros se reanudó el pasado martes hasta el lunes, ese día, los huelguistas decidirán sobre la continuidad del movimiento. La requisición es un método vigente en la legislación francesa que permite al estado multar y hasta encarcelar a trabajadores que se nieguen a hacer sus labores. Una forma legal y autoritaria de romper una huelga. En Nantes, aunque deberían haber reanudado el trabajo este viernes, el anuncio del 49-3 fue "la gota que rebalsó el vaso". Los trabajadores decidieron finalmente no volver al trabajo, y la huelga continuará la semana que viene. En Saint-Brieuc (Côtes-d’Armor), votaron casi por unanimidad renovar la huelga hasta el viernes 24 de marzo tras los anuncios del jueves, mientras que en Auch, votaron mantener la huelga hasta el miércoles por la noche. En Orleans, fue el anuncio del 49-3 lo que llevó a los basureros de la ciudad a declararse en huelga a partir del lunes.
En el sector educativo, varios sindicatos convocan una huelga a partir del lunes
Mientras que las direcciones nacionales de la intersindical de la enseñanza se contentaron, en su comunicado conjunto, con llamar a "proseguir la movilización durante las pruebas de especialidad", convocando una huelga sólo "cuando sea posible", varios sindicatos de profesores optaron por convocar una huelga a partir del lunes.
Una elección hecha bajo la presión de los docentes, fuertemente movilizados contra la reforma previsional, pero también por los problemas específicos del sector. En efecto, los días 20, 21 y 22 de marzo tendrán lugar las pruebas anticipadas de bachillerato impuestas por la reforma de 2017. Los profesores se opusieron masivamente a esta reforma por su carácter profundamente desigual y su calendario imposible. A escala nacional, la CGT Educ’Action y Sud Education llaman al personal docente a la huelga a partir del lunes, tanto contra la reforma previsional como por el aplazamiento de las pruebas de especialidad. A escala local, la intersindical académica bretona (SNES-FSU, CGT Educ’action, SNFOLC y SUD Education) también ha llamado a la huelga a partir de los exámenes preliminares de bachillerato.
Estas convocatorias demuestran la voluntad de los huelguistas de endurecer la huelga, y son la base de una verdadera ofensiva
Estas convocatorias de huelga, que se anticipan varios días a la jornada fijada por la intersindical nacional, responden a la voluntad de los huelguistas de endurecer y radicalizar el movimiento, y dan testimonio del rechazo de muchos trabajadores a esperar una semana para ir de nuevo a la huelga.
En efecto, la decisión de Macron de utilizar el artículo 49-3 para aprobar su reforma previsional ha abierto una verdadera crisis política, frente a la cual la intersindical nacional sigue queriendo adoptar una actitud supuestamente "responsable", para evitar cualquier "exceso", negándose así a apoyarse en las dinámicas de radicalización y de manifestaciones espontáneas en curso para construir una relación de fuerza para oponerse frontalmente al gobierno.
Los llamados a renovar la huelga a partir del lunes son así un verdadero punto de apoyo para imponer otra estrategia contra Macron, Borne y su gobierno, para generalizar y endurecer la huelga renovable, cuyas consignas van más allá de la retirada de la reforma, sino que también plantean la cuestión de los salarios, las condiciones de trabajo. Una huelga que también plantea reivindicaciones políticas, para acabar con el 49-3 y las instituciones antidemocráticas de la V República.
Estos llamados sirven para pasar realmente a la ofensiva, imponiendo nuestros medios de acción y nuestras reivindicaciones, ¡para volver a la ofensiva y deshacernos de Macron Borne y de sus reformas! |