Luego de la jornada de trabajo y estudios, fueron decenas quienes se sumaron a compartir y conversar sobre el desafío desde el movimiento de mujeres y disidencias en Chile, en un escenario político social, con un proceso de fraude constitucional en curso, una crisis inflacionaria que ha empujado a miles de familias obrera a pagar la crisis, mientras los grandes empresarios han enriquecido sus bolsillos.

La jornada significó intercambiar experiencias, relevar la lucha de los y las trabajadores de la salud y la educación de la comuna de San Bernardo que hoy pelean por conquistar sus demandas unificados, peleando por no más despidos, por el pago de sueldos impagos, y condiciones laborales, dando un ejemplo a nivel nacional, enfrentando al municipio de San Bernardo dirigido por el Partido Socialista, que ha profundizado la precariedad instalada por la derecha de la UDI décadas anteriores.

Al mismo tiempo en la jornada se desarrolló, un fuerte repudio, al nombramiento del senador Gustavo Sanhueza de la UDI, que se convierte en el primer hombre que preside la Comisión de la Mujer y Equidad de Género, reemplazando a Claudia Pascual (PC), que de manera vergonzosa le dio su voto junto a Isabel Allende (PS). Tras su designación, la ministra de la mujer, Antonia Orellana (Convergencia Social), le dio los mejores deseos para su gestión.

Muchas personas en la instancia comentaron que la pasada jornada del día internacional de las mujeres, en sus espacios de trabajo o estudios primó el silencio. Que nada tuvo de efectivo el llamado a huelga realizado nominalmente por la Coordinadora 8 de Marzo. Fruto de la responsabilidad de las propias direcciones sindicales y estudiantiles.No obstante, las trabajadores del aseo y biblioteca de la UMCE, desarrollaron una importante concentración en los pastos centrales de la universidad expresando las demandas de igual trabajo e igual salario, denunciando la precariedad laboral, que ha sostenido la actual rectora Elisa Araya en su administración, y la importancia de seguir movilizadas y unidas, tras haber protagonizado a inicios de año, una fundamental e inédita lucha por el reajuste y la defensa de la educación pública.

Las y les asistentes comentaron sus impresiones sobre la marcha del día internacional de la mujer. Una marcha masiva a nivel nacional, que puso al centro la demanda por terminar con la violencia machista y patriarcal, que es una demanda fundamental para millones, pero que poco tuvo de contenido de una reivindicación y disposición de lucha por las demandas históricas del movimiento de mujeres, como lo son el derecho al aborto legal, la educación no sexista, el igual trabajo e igual salario, la desmilitarizcion del Wallmapu, entre otras. Cuestión que ha aportado sin duda, -reduciendo el carácter disruptivo de este - la institucionalización y la instrumentalización del gobierno del movimiento de mujeres.
De las cuestiones claves que surgieron de la instancia, fueron las ideas de:

En este escenario enfrentar por ejemplo el nuevo antidemocrático proceso constituyente, creyendo necesario levantar una fuerte campaña, en nuestros lugares de estudio y de trabajo por el voto Nulo para las elecciones al Consejo Constitucional del 7 de mayo, impulsando la autoorganización para pelear por una Asamblea Constituyente Libre y Soberana, para así poder enfrentar la precarización de la vida.

Por otro lado desarrollar el lanzamiento del libro "Mujeres, revolución y socialismo" el que tiene una compilación de varios artículos de grandes revolucionarios y revolucionarias como Marx, Engels, Rosa Luxemburg, Alexandra Kollontai, Inessa Armand, Lenin, Trotsky, Clara Zetkin y Eleanor Marx, que teorizan el como poder lograr la emancipación de la mujer, artículos totalmente atingentes a nuestra época.

Desde Pan y Rosas en varios países, ponemos al centro las luchas de las mujeres, de la clase trabajadora y las y los oprimidos, como por ejemplo en Perú que peleamos en contra de la dictadura de Dina Boluarte, o también en Francia, donde muchas trabajadoras y estudiantes se están movilizando en contra de la reforma de Macron.

Creemos que solo con la unión y la organización vamos a poder conquistar todo nuestros derechos, los de la mujeres y diversidades,y los de la clase trabajadora, con la perspectiva de un feminismo de clase y socialista que tome en sus manos las luchas de todos los sectores oprimidos para lograr una sociedad donde valga la pena vivir.