El próximo 20 de abril trabajadoras y trabajadores de la salud de la Ciudad de la Marrón Clasista y estudiantes de medicina de En Clave Roja nos juntaremos para relanzar una organización común, en la Facultad de Medicina de la UBA. Necesitamos organizarnos juntos para pelear por todos nuestros derechos y por los de nuestros pacientes desde una perspectiva anticapitalista, porque nuestras vidas no son mercancías, porque en conjunto podemos organizar la salud en función de las necesidades sociales y no de las ganancias. Contaremos con la presencia de la diputada nacional Myriam Bregman y la legisladora porteña Alejandrina Barry, ambas del PTS en el Frente de Izquierda, que acompañan todas nuestras luchas.
Como aporte para el debate compartimos con ustedes la declaración de la Marrón Clasista Salud.
AGRUPACIÓN MARRÓN CLASISTA SALUD: sumate a luchar por la salud que merecemos
Un panorama de la salud en la actualidad
Las imágenes de los trabajadores de la salud luchando en las calles recorren todo el mundo, lo vimos en el Reino Unido, en Francia, en EEUU, el Estado Español. Es que la pandemia expresó al máximo que lo que no le importa al capitalismo es la salud sino las ganancias. No sólo sus Estados en los sucesivos gobiernos no revirtieron el desguace de los sistemas de salud dictaminados por los grandes organismos de crédito (FMI, Banco Mundial) en los 90 y que continúan hasta la fecha con una fuerte desinversión. Sino que los empresarios con el visto bueno del Frente de Todos pusieron patentes a las vacunas, beneficiando a los grandes laboratorios y aumentaron los ritmos y la carga de pacientes a los trabajadores de la salud; de ninguna manera pusieron todos los recursos necesarios para enfrentar esta crisis sanitaria, fuimos nosotros los que le pusimos el cuerpo y seguimos defendiendo una salud pública gratuita y de calidad, contra una salud de ricos que quieren imponer.
Por eso ahora decimos: ¡Basta! La gran lucha de los elefantes en Neuquén, los residentes y concurrentes en CABA, en Mendoza, trabajadores de la salud en Jujuy, Córdoba y otras provincias evidencian esta situación en nuestro país. Este año nuevamente se vota un presupuesto a la baja, licuado cada vez más por la inflación, en el que la prioridad es cumplir con los mandatos del FMI, al servicio de pagar una deuda totalmente ilegal, ilegítima y fraudulenta. Mientras tanto, quienes dicen representar a los trabajadores en las direcciones sindicales como ATE, AMM, Federación, UPCN, SUTECBA militan la resignación, la desmovilización, la división entre los sectores, y el ajuste cerrando paritarias de pobreza por debajo de la inflación. Entre 2021 y 2023 la salud ya acumula un recorte del 35% en términos reales. El gobierno del Frente de Todos, tanto Alberto como Cristina y Massa, son los responsables políticos de que se haya llegado al 43,1% de pobreza en el país, votaron todas las políticas de ajuste contra las y los trabajadores y el pueblo como así también le dan rienda suelta a las empresas para aumentar todos los servicios y los alimentos. La oposición de derecha de Macri, Larreta, Bullrich y Milei tampoco son alternativa, exigen más ajuste para los trabajadores y más beneficios para los dueños de todo, son los que promueven la reforma laboral. Todos ellos ya gobernaron y son los causantes de esta miseria. El clima menemista que quieren imponer todos estos candidatos avecina que tenemos por delante nuevas luchas por defender el derecho a la salud, al trabajo, a la vivienda, a la educación y la jubilación.
Por su parte, los grandes empresarios de la salud, dueños de clínicas como Swiss Medical, laboratorios como Bayer, Roche, Roemmers, industrias de insumos médicos, no paran de beneficiarse con negociados con el Estado y siempre están “remarcando” los precios que le ponen a nuestras vidas, aumentando las cuotas de las prepagas, co-pagos, el valor de los medicamentos, decidiendo ellos si nos autorizan “por los costos” nuestros tratamientos. Pero nuestras vidas valen mucho más que sus ganancias, no somos mercancías.
¿Quiénes somos?
Desde la Agrupación Marrón nos organizamos para enfrentarlos, defender la salud pública y que sea realmente un derecho accesible para todes. Somos trabajadores de todos los sectores de los hospitales y efectores, enfermeros, médicos, técnicos, de maestranza, administrativos, camilleros, residentes, concurrentes, etc. Sólo con la unidad de quienes le ponemos el cuerpo todos los días podemos reorganizar el sistema de salud desde abajo, centralizarlo en la órbita del Estado y gestionarlo junto a nuestros pacientes, para que el mismo pueda ponerse en función de las necesidades sociales, que nosotros conocemos mejor que nadie. Nos referenciamos en el Frente de Izquierda y de los Trabajadores Unidad, con diputados como Myriam Bregman, Nicolás del Caño, Alejandro Vilca, porque opinamos que la salida a esta crisis es por Izquierda, porque son quienes bancan las luchas de los laburantes desde sus bancas y en las calles. Nos organizamos con otros trabajadores en asambleas también para cambiar esta sociedad.
El sistema de salud argentino
El sistema de salud argentino se divide en 3 subsistemas: público, privado y de obras sociales. Bajo los lineamientos neoliberales del Banco Mundial, desde los sucesivos gobiernos en los 90 se realizó una ofensiva sobre el sistema de salud descentralizándolo, fragmentándolo y robusteciendo aún más al sector privado. Los organismos de crédito internacional como éste y el FMI buscan imponer sus propios programas en los que se prioriza es la salud al menor costo posible para los Estados, con escasez de recursos sanitarios y de infraestructura, con condiciones laborales cada vez peores para quienes lo integran: en algunos casos los trabajadores de la salud hoy llegan a hacer guardias de 24 y hasta 36 hs sin dormir, corren de un trabajo al otro porque la plata no alcanza con jornadas larguísimas, agregando horas extras. Se produce a su vez el crecimiento del sector privado en detrimento de lo público, se privatizan servicios en el sistema público y la subcontratación sin derechos para sus laburantes. Lo que queda fuera de la cobertura se privatiza en cada hogar, recayendo el sistema de cuidados de niños, adultos mayores, personas con discapacidad mayoritariamente en las mujeres que los sostienen sin retribución ni ayuda alguna. Frente a esto, tanto el peronismo en sus diferentes gobiernos, hoy con Alberto, Massa y Cristina a la cabeza, como la oposición de derecha de han sido los mayores defensores y ejecutores de estas políticas, ninguna de ellas se ha revertido bajo los diferentes gobiernos, sino que se han profundizado, y todos prometen seguir cumpliendo con los mandatos de los organismos de crédito.
Ahora ellos exigen que se eleve la edad jubilatoria promoviendo reformas previsionales; que la medicina haya avanzado para elevar la esperanza de vida de las personas lo tratan como un problema, un gasto que es necesario recortar para poder pagarles sus deudas. El FIT-U ya ha denunciado que nuestra deuda con el FMI tiene una larga historia de ilegalidad, mecanismos fraudulentos e ilegitimidad, nosotros no vimos ni un peso invertido en un hospital ni ningún efector con eso. También estos organismos son los que exigen más precarización y una reforma laboral a la medida de los grandes empresarios, afectando así nuestras condiciones de vida, por lo tanto, también a nuestra salud física y mental (la llamada “CUS” se perfila como una de las contrarreformas en sus tinteros al servicio de mayor privatización).
¿Cómo pensamos a la salud?
Para nosotros, la salud no es solamente un asunto biológico cómo se presenta desde el modelo médico hegemónico, sino que tiene múltiples determinaciones que se interrelacionan. Es que, con hambre y miserias, sin agua potable, con viviendas hacinadas, con tarifas energéticas impagables y contaminantes, con agrotóxicos, con ritmos de trabajo asfixiantes no hay salud física, mental ni social posible! Contra estos determinantes sociales totalmente insalubres también peleamos, contra las expresiones del machismo, la lógica manicomial, la persecución por consumo de drogas. Exigimos plata para salud y no para la deuda, un aumento urgente del presupuesto para salud, educación, vivienda; rechazamos el recorte en discapacidad y peleamos por una relación armónica entre el medio ambiente y la humanidad que el capitalismo es incapaz de cumplir por su irracionalidad lucrativa.
La mayoría de quienes trabajamos en salud somos mujeres, peleamos por un plan de emergencia contra la violencia de género (proyecto presentado por el FIT-U), la aplicación de la ESI y la ILE, por el real acceso de la población LGTBIQ al sistema de salud y por una perspectiva de género en el mismo. A su vez, por la aplicación real de la Ley Nacional de Salud Mental y Adicciones, con un presupuesto e infraestructuras acordes, con participación de las organizaciones de usuarios; la legalización de la marihuana tanto en su uso medicinal como recreativo, con un plan contra el consumo problemático con un presupuesto acorde y acceso y perspectiva de reducción de daños.
¿Qué sistema de salud necesitamos?
Proponemos que el sistema de salud rompa sus divisiones y se centralice en un único sistema público, gratuito, basado en la estrategia de la Atención Primaria de la Salud, gestionado por quienes le ponemos el hombro día a día, por nuestros pacientes que lleven sus necesidades y que decidamos en conjunto en comités, al que se puedan sumar expertos, dónde y cómo poner los recursos necesarios para resolverlas. También para que decidamos sobre nuestros ritmos y condiciones de trabajo. Lo mismo proponemos para toda la industria sanitaria, farmacéutica y de laboratorios, que haya producción pública de medicamentos y liberación de patentes. De esta forma también podemos organizar la producción de los insumos sanitarios y orientar las investigaciones a resolver los grandes problemas sociales.
Proponemos el pase a planta de todo el personal de todos los sistemas, en todos los sectores, también la reducción de la jornada laboral a 6 horas, 5 días a la semana y el reparto de las horas de trabajo con nuevo personal, con un salario que cubra la canasta familiar indexado por inflación, repudiando el pluriempleo y las eternas horas extra para llegar a fin de mes; exigimos el 82% móvil, guarderías en los lugares de trabajo y estudio, licencias pagas y extendidas por maternidad y paternidad; que enfermería (con o sin licenciatura), bioimágenes, psicomotricidad, instrumentación quirúrgica sean profesionales; que los concurrentes conquisten su histórico reclamo de salario y ART, que las instancias formativas, de capacitación y formación se consideren dentro de la jornada laboral y sean gratuitas.
¿Cómo podemos conquistarlo?: Impulsemos la autoorganización en cada hospital y centro de salud
En ese camino promovemos la conformación de comisiones de seguridad e higiene para autoorganizarnos de forma independiente del gobierno, de la patronal, las burocracias sindicales desde ahora y luchar por estas condiciones. Ellos pueden ser la base para una gestión sanitaria colectiva y no lucrativa. Sabemos que a las conducciones sindicales les tenemos que imponer los planes de lucha, ellos traban toda conquista y esparcen la resignación al sistema tal como está ahora. Por eso luchamos por la recuperación de los sindicatos de sus manos, para que sean una herramienta de lucha, con asambleas y mandatos desde abajo para organizar un plan de lucha coordinado contra el ajuste que estamos viviendo y que intentarán recrudecer. Para eso nos preparamos, poniendo en pie fuertes corrientes militantes clasistas en los lugares de estudio y trabajo que den estas peleas.
Nos referenciamos en el modelo de salud soviético, que fue modelo hasta cierto momento en la OMS. El mismo se puso en pie en 1918 en el marco de la Revolución Rusa. Ellos llevaron adelante un sistema público centralizado y gratuito, gestionado por trabajadores de la salud y usuarios, con igualdad de acceso, fortalecimiento de la prevención, promoción y educación para la salud, con reducción de la jornada laboral, nacionalización de la industria sanitaria, entre otras medidas. Pudieron hacerlo gracias a la ruptura con el régimen capitalista mediante la revolución y la construcción del socialismo. En este sistema se pudieron tomar las decisiones desde abajo en organismos de autoorganización (soviets) que decidían la planificación de la economía en relación a las necesidades sociales.
Hoy nos organizamos en asambleas impulsadas por el PTS en el Frente de Izquierda-Unidad, en cada barrio junto a otros trabajadores para dar una salida por izquierda a esta crisis política, económica, social y política. Contra la desocupación y el ajuste queremos construir una fuerza social capaz de dar vuelta las prioridades, de derrotar este régimen social decadente con la fuerza de las mujeres, los trabajadores y la juventud. Por el no pago de la deuda, por la nacionalización y unificación del sistema bancario, por el monopolio estatal del comercio exterior. Por un gobierno de los trabajadores y trabajadoras donde la salud sea realmente un derecho y no una mercancía.
Sumate a dar esta pelea con nosotres, nos encontrás en: IG La Marrón Salud |