Este día históricamente ha mostrado que las personas trans conformamos un grupo oprimido en la sociedad capitalista, sin embargo, el discurso "oficial" de gobiernos progresistas, ONG’s, empresas que tiñen sus tiendas de arcoíris y celebridades varias ha sido de constante victimizacion, llamando a "sensibilizar".

Por ejemplo la OTD (Organización no gubernamental para personas trans y LGBTTIQ+) ha cumplido un papel de acompañamiento material y psicológico a personas trans, algo que ningún gobierno de turno se ha dispuesto seriamente a realizar, pero, el límite está en que perpetúan un rol asistencialista , de buscar resolver problemas a determinadas personas de la comunidad cuando existe una violencia sistemática hacia nuestros derechos e identidades.

Esta organización, en su reciente declaración por el 31 de Marzo sostiene que las diversidades sexo genéricas vivimos este día "con el ideal de que algún momento, en algún lugar, todas las personas podrán vivir su vida en plenitud". Dejando la iniciativa de transformación de esta sociedad profundamente machista, dónde capitalismo y patriarcado hacen una combinación nociva para las personas trans, a la vaga esperanza de un futuro mejor a través de actividades de caridad y un "cambio cultural".

El gobierno "progresista" de Apruebo Dignidad, con el que OTD trabaja activamente, se encuentra hoy ocupado cocinando un nuevo fraude constituyente, que mantendrá en una eventual constitución, los pilares machistas y LGBTTIQ+fóbicos que la derecha ha venido impulsando en sus instituciones y campañas hace más de treinta años, repudiando el matrimonio igualitario, la educación sexual integral y hasta la ley de identidad de género.

La situación de las personas trans ha empeorado desde la pandemia, con escaso acceso a trabajo, educación y salud, es urgente levantar iniciativas de organización para analizar y cambiar nuestra realidad.

Actualmente, en Chile, contamos con una ley de identidad de género y ciertas "guías", es decir protocolos y en servicios públicos como educación y salud. Sin embargo estos excluyen a las infancias trans y al espectro no binario.

Es urgente plantear otro camino tanto para la reconstrucción de una memoria de la historia trans no victimizante como para organizarnos por nuestros derechos. Uniendonos a otros sectores oprimidos de la sociedad capitalista como por ejemplo el movimiento feminista.

Organicemos un movimiento independiente al gobierno que ponga al frente nuestras demandas y no las necesidades de un sistema explotador y patriarcal, levantemos asambleas y comisiones de género en nuestro trabajo y lugares de estudio por qué aquí estamos, ¡ ruidosxs y visibles !