El asesinato del dr. Martin Luther King Jr. hace cincuenta años provocó levantamientos masivos que formarían la base de una nueva ola de movimientos revolucionarios negros. ¿Cuáles son las lecciones políticas que los revolucionarios pueden tomar hoy del rico legado del Movimiento de los Derechos Civiles y el Movimiento Revolucionario Negro?
A medida que los maestros se levantan en Oklahoma, Kentucky, Arizona y Virginia Occidental, la lucha continúa contra los asesinatos racistas de la policía en Sacramento, al igual que las protestas de desobediencia civil en Memphis en el centro de detención de inmigrantes de la ciudad. El legado político de Martin Luther King Jr. vive 50 años después de su asesinato.
Hace 50 años, el 4 de abril de 1968, el Dr. Martin Luther King Jr. fue asesinado en un hotel en Memphis, Tennessee. El asesinato ocurrió días antes de la fecha prevista para marchar con los trabajadores de saneamiento del Local 1733 de AFSCME. El dr. King dejó un legado de resistencia no violenta a la segregación en el Sur y luego se opuso a la Guerra de Vietnam y al imperialismo estadounidense.
La perspectiva de King sobre la no violencia fue apoyada por un movimiento masivo de jóvenes, agricultores y trabajadores en todo el país. Condujo al final formal de la segregación y obligó al gobierno federal a intervenir en el sur, donde las organizaciones supremacistas blancas estaban asesinando a cualquiera que desafiara sus ataques racistas.
Si bien el Movimiento por los Derechos Civiles se basó en la política liberal, su magnitud e inclusión de la lucha de los trabajadores forzó al Partido Demócrata -el cual hasta entonces había sido indiferente a las décadas de violento terror racista infligido a los negros, comunistas y sindicalistas- a defender la integración, incluso en la educación para que a los niños negros se les permitiera asistir a escuelas que tendrían mayores recursos.
Sin embargo, la ideología política del pacifismo no pudo resolver la segregación económica o las condiciones de pobreza en los "guetos" negros. En el momento del asesinato de King, gran parte de la juventud negra había rechazado el pacifismo como una herramienta del imperialismo y buscaba una política radical y revolucionaria.
Del asesinato de King nacieron revolucionarios negros
Para 1965, los disturbios en Watts, California, mostraron un rechazo al pacifismo y una perspectiva combativa contra la policía. En los últimos años de la vida de King, él se unió al movimiento contra la intervención imperialista estadounidense en Vietnam. King declaró:
"Todavía creo que el cambio se produce de manera más significativa a través de la no violencia (...) sabía que nunca más podría volver a alzar la voz contra la violencia sobre los oprimidos en los guetos sin haberle hablado primero, claramente, al mayor proveedor de violencia en el mundo de hoy: mi propio gobierno ".
King fue empujado hacia la izquierda mientras mantenía su ideología pacifista.
El asesinato de King, supuestamente por el fanático James Earl Ray, se llevó a cabo cuando el FBI había estado monitoreando furiosamente e intentando socavar a King. Llegó en un momento en que las personas, especialmente los jóvenes, se movían a la izquierda del Movimiento de Derechos Civiles. Ya había habido rebeliones en Watts (1965) y Detroit y Newark (1967), por ejemplo.
Cuando King, que era visto como una figura pacífica y religiosa, fue baleado en Memphis el 4 de abril, una explosión de indignación arrasó el país. Los levantamientos surgieron de la ira contra el asesinato de King, y su carácter violento fue un rechazo al pacifismo. Se produjeron olas de disturbios en decenas de ciudades importantes de los Estados Unidos.
Se llamó a la Guardia Nacional y el ejército de los Estados Unidos se vio obligado a traer tropas de Vietnam para sofocar las rebeliones. Fue el comienzo del Movimiento del Poder Negro. Las Panteras Negras, el Ejército de Liberación Negra y el SNCC (que cambió su nombre de Comité Coordinador Estudiantil No Violento a Comité Coordinador Nacional Estudiantil) florecieron en estas luchas.
Poder negro y derechos civiles
Sin embargo, el movimiento hacia la lucha combativa no estaba tan conectado con el movimiento sindical como lo había estado el movimiento del dr. King. Cuando King fue asesinado, se estaba preparando para unirse a una marcha en apoyo de los trabajadores de limpia en huelga en respuesta al hecho de que a los trabajadores negros se les pagaba menos que a los trabajadores blancos y trabajaban en peores condiciones.
Su estrategia -reunir a líderes sindicales y religiosos para luchar por las demandas democráticas bajo un movimiento de masas- organizó a los negros y blancos para combatir el racismo.
El Movimiento por los Derechos Civiles incluyó tanto a jóvenes como a personas mayores. El Movimiento por los Derechos Civiles continuó en la lucha del United Farm Workers (también organizada en torno a un boicot), así como en futuros movimientos laborales, LGBT y de discapacitados de la década de 1970. Todos estos, además de la reciente lucha por los derechos de los inmigrantes, han sido influenciados directamente por King, y todos reclaman su legado.
Sin embargo, tal y como fue el caso con King, partes importantes de estos movimientos se atrincheraron en el Partido Demócrata. La energía de su lucha inicial se disipó en el electoralismo. El legado de no violencia de King se ha utilizado para socavar la lucha combativa contra el racismo y la burocracia sindical lo ha utilizado para mitigar las luchas de los trabajadores.
Los movimientos revolucionarios negros rechazaron la filosofía religiosa de King de "poner la otra mejilla". En cambio, fueron influenciados por Malcolm X y Marcus Garvey. De estas raíces surgieron líderes como Kwame Ture, que abandonó el Movimiento por los Derechos Civiles y acuñó el término "Poder Negro".
La perspectiva de King era reformar a los Estados Unidos en un país de igualdad racial. Los revolucionarios negros no se hacían ilusiones en la reforma del capitalismo estadounidense. Lucharon no solo por los derechos civiles sino también por el socialismo revolucionario y contra el capitalismo. Sin embargo, a diferencia de King, no tenían conexión con los sindicatos, que muchos descartaron como racistas, con la excepción del Movimiento Sindical Revolucionario de Dodge (DRUM, por sus siglas en inglés) en Detroit.
En lugar de un movimiento intergeneracional masivo, los grupos revolucionarios negros como los Panthers y el nuevo SNCC eran casi exclusivamente negros, pero no anti-blancos. Su membresía estaba compuesta principalmente por personas más jóvenes, no por la generación anterior que había luchado contra el (Ku Kux) Klan en la era de los Derechos Civiles.
Además, aunque los movimientos revolucionarios negros entendieron la necesidad de la autodefensa armada contra el estado, no tenían los miembros, los recursos o la comprensión de las fuerzas represivas masivas del estado, las cuales fueron arrojadas contra ellos con salvajismo racista mediante la conjunción del FBI y la policía local. Sin ningún poder económico basado en los lugares de trabajo o una comprensión de la crueldad del estado, los grupos revolucionarios negros fueron diezmados a través de sangre derramada y las rejas de la prisión.
Intentando falsificar a King
Como Lenin escribió en El Estado y Revolución: “Durante la vida de los grandes revolucionarios, las clases opresoras los perseguían constantemente, recibían sus teorías con la malicia más salvaje, el odio más furioso y las campañas de mentiras y calumnias más inescrupulosas. Después de su muerte,
se intenta convertirlos en iconos inofensivos, para canonizarlos, por así decirlo, y santificar sus nombres hasta cierto punto para el ’consuelo’ de las clases oprimidas y con el objeto de engañar a estos últimos, mientras, al mismo tiempo, robaban la sustancia revolucionaria de su teorpia, atenuando su filo revolucionario y vulgarizándola ".
Corporaciones como AT&T, Cingular Wireless, en el reciente anuncio del Super Bowl de Dodge, han usado la importancia histórica del dr. King para vender sus productos. Los políticos que se habrían opuesto vehementemente al Dr. Martin Luther King se apresuran a reclamar su legado. Exhuman su cadáver en un intento de defender el racismo, la xenofobia y la intolerancia.
Esto es inherente al uso de comentarios como, "Si King viviera …" seguido de la basura reaccionaria de las personas que intentan pacificar la militancia negra contra el racismo. Pero toda la carrera política de King desafió el racismo contra los negros, y esta fue la razón de su asesinato.
El legado de King se basó en la lucha de masas; él luchó por los derechos sindicales y entendió que se necesitaba una lucha unida y multirracial contra el racismo. Desafió al Klan con solidaridad y dedicación. También utilizó la táctica del boicot que atrajo la atención internacional y la simpatía nacional. Los movimientos revolucionarios negros que crecieron luego de su asesinato rechazaron la debilidad política de King -por ejemplo, su pacifismo y su reformismo- pero estuvieron enraizados en la necesidad de organizarse contra el imperialismo y el racismo.
Uniendo las tradiciones
Nuestro desafío hoy es aprender de las experiencias de los movimientos políticos anteriores a nosotros. Es necesario repetir, tanto el legado de King -arraigado en el movimiento obrero, multirracial pero que organiza intencionalmente a los oprimidos contra el racismo- como la huelga de maestros a través de la mitad del país. Esa lucha debe estar vinculada con la lucha contra el racismo y, en particular, la brutalidad policial. La militancia de los movimientos revolucionarios negros y su firme anticapitalismo y antiimperialismo sin compromisos con el reformismo o el pacifismo.
King es una de las figuras de la historia reciente con mayor influencia en la política de los Estados Unidos. Su lucha por los oprimidos, el apoyo a la clase trabajadora y las movilizaciones masivas son necesarias para las luchas de hoy.
Cualquier movimiento revolucionario, masivo y multirracial, de la clase trabajadora contra el fanatismo, el capitalismo y el imperialismo debe aprovechar las fortalezas de las tradiciones revolucionarias de King y y las tradiciones revolucionaras negras, y debe basarse en comunidades y lugares de trabajo.
Es nuestro propio legado de resistencia llevar estas luchas más allá de las que nos precedieron; es nuestro deber para ganar.
Este artículo se publicó en Left Voice de Estados Unidos el 5 de abril de 2018. Left Voice forma parte de la red internacional La Izquierda Diario del cual ofrecemos su traducción. Traducido por Raúl Dosta para la Izquierda Diario México. |