Este jueves Alejandra Arreguez fue entrevistada en el programa “Buen Día” de La Gaceta Play. En diálogo con Indalecio Sánchez, planteó las siguientes definiciones:
- Sobre el régimen proscriptivo de los acoples: “Hay una pelea, un desafío grande para la izquierda de romper un piso proscriptivo, completamente fraudulento y que ingrese por primera vez en la historia la izquierda clasista a la Legislatura. Es el régimen de los acoples, cualquiera haya ido a votar se acuerdo del mar de boletas en las elecciones provinciales. Hay 105 partidos habilitados que son básicamente partidos fantasmas, parásitos, que aparecen cada cuatro años con punteros, que son los amigos, los vecinos del poder. En Trancas hasta la abuela de Jaldo debe tener un acople. Arman todo un régimen electoral que es la forma en la que tienen el peronismo en alianza con las otras fuerzas que gobiernan de impedir que ingresen verdaderas fuerzas opositoras en la Legislatura”.
- Un pacto contra el pueblo trabajador: “De los 105 partidos que hay no hay ni uno que apoyen hasta el final las demandas del pueblo trabajador. Empezando por la más elemental, saber qué es lo que pasa ahí adentro. Es imposible saber qué se vota. Andá a encontrar la letra chica del presupuesto, en qué se gasta la plata, cuántos asesores, cuántos asesores tienen, la cantidad de empleados. El propio bussismo que hace campaña, que hay que reducir el gasto y que se yo, hoy no puede explicar qué pasó con las decenas de asesores que tenía dentro del recinto. Hay ahí un pacto que además de tener esta cuestión del silencio, de la complicidad entre ellos, tienen otro dato importante que es la necesidad de que las voces de los laburantes no lleguen nunca a la Legislatura”.
- La importancia de que la izquierda ingrese a la Legislatura: “Intentar dejar afuera a la izquierda es una idea fija que tiene el conjunto del régimen –del peronismo, los radicales, Cambiemos, el propio Masso, que forma parte de este pacto de complicidad dentro de la Legislatura, para que estas voces no lleguen. Y porque saben que en cuanto la izquierda ponga un pie ahí adentro se destapa una olla de la que después se tendrán que hacer cargo, que es lo que hacen nuestros compañeros Nicolás del Caño, Myriam Bregman, Alejandro Vilca, en el Congreso de la Nación. Son los diputados que cobran como un docente, que jamás levantan la mano por una medida que vaya en contra de los intereses de los trabajadores. Hay que romper esa proscripción”.
- Sobre la alianza entre Bussi y Milei: “Son fuerzas que hacen demagogia contra la casta, contra los políticos tradicionales pero en realidad lo que están diciendo es que quieren privatizar las universidades, que no haya más hospitales públicos. Cuando se desenmascara eso pierden apoyo. Hay una pelea importante para que este descontento, que con justa causa tenemos todos, no lo capitalice la derecha. Por eso en esta campaña decimos que la salida es por izquierda.
- La salida es por izquierda: “Cuando decimos que la salida por izquierda queremos discutir propuestas. Por ejemplo, frente a la desocupación se la pasan despotricando pero no dicen cómo resolverlo. Ellos dicen reforma laboral, quitarle derechos a los trabajadores, que sea más fácil despedir. ¿Qué decimos nosotros? Para terminar con la desocupación hay que repartir las horas de trabajo entre todas las manos disponibles, 6 horas, 5 días. Reducís la jornada laboral garantizando un salario igual a la canasta familiar y podés generar si implementas esta medida nada más en las 12.000 principales fábricas podés generar 1 millón de puestos de trabajo.”
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