Estalló la interna en el PRO entre Larreta y Macri a partir del decreto del Jefe de gobierno porteño donde desdobla las elecciones porteñas con las nacionales, es decir, mismo día de votación en mesas separadas. Más allá de esta maniobra antidemocrática de Larreta, la misma que utilizara Macri en el 2015, conlleva el voto electrónico para las autoridades porteñas, un sistema con boleta electrónica que ya la justicia comprobó que fuera hackeado en las pasadas elecciones del 2015. Un sistema vulnerable que no garantiza el voto secreto y habilita irregularidades.
La “vulnerabilidad” de este sistema de votación electrónica fue revelado por las pericias realizadas por la entonces Policía Metropolitana, la antecesora de la Policía de la Ciudad y el hackeo fue comprobado por la investigación encabezada por la jueza María Luisa Escrich.
Días antes de las elecciones del 5 de julio del 2015, la empresa encargada del sistema de votación electrónico Magic Software Argentina (MSA) reconoció que habían sufrido un hackeo.
La jueza Maria Luisa Escrich a cargo de la investigación del delito informático, dos días antes de las elecciones ordenó allanar los domicilios desde los cuales se había accedido en forma remota a los servidores que la empresa MSA utilizaría para la elección.
Uno de los implicados era el programador Joaquín Sorianello, quien fuera detenido y finalmente sobreseído ante la comprobación de que había advertido de la vulnerabilidad del sistema informático a la empresa MSA, como consta en los expedientes de la causa.
El otro era Martin Leandro Manelli quien, según consta en el pedido de allanamiento de la fiscala Silvina Rivarola, “no solo visualizó numerosa información del sistema, sino que realizó procesos relacionados a la edición, creación y eliminación de información, tales como eliminar a la persona o establecimiento”, como relata el diario digital Nueva Ciudad.
Como quedó comprobado en el 2015, el sistema de votación electrónico que decreto Larreta es como mínimo vulnerable, mientras el cambio de las reglas de juego a meses de esta elección es completamente antidemocrático, como lo denunciará la diputada nacional por la Ciudad y precandidata a presidenta Myriam Bregman del Frente de Izquierda "Larreta aprendió de su maestro Macri que en 2011 y 2015 desdobló las elecciones a su favor. Repudiamos este nuevo manoseo y que se utilice un formato electrónico que en 2015 sufrió hackeos, y cuya falta de seguridad en los resultados fue denunciada incluso por el mismo Lousteau. El Jefe de Gobierno hace uso de los recursos del Estado de la Ciudad para dirimir sus internas partidarias".
Por su parte la legisladora porteña del FIT, Alejandrina Barry sumándose a la denuncia de su compañera, expresó “La gran mayoría de las fuerzas políticas hemos denunciado esta maniobra, por eso vamos a presentar en la Legislatura un proyecto para que se derogue el desdoblamiento de las elecciones".
De prosperar la derogación del decreto de Larreta por el desdoblamiento de las elecciones, dejaría también sin efecto la utilización del sistema de votación electrónica, aunque podría utilizarse en otras oportunidades. Este mecanismo, como mínimo vulnerable, fue aprobado e incorporado al Código Electoral de la Ciudad de Buenos Aires por la Legislatura, con los votos del oficialismo y acompañado por Unidad Ciudadana la antecesora del Frente de Todos y rechazado por los radicales de Lousteau (hoy beneficiado por la maniobra de Larreta y el Frente de Izquierda.
En esa sesión el Frente de Izquierda representado por Patricio Del Corro ya denunciaba lo mismo que hoy y algo que sucede a lo largo y ancho del país, aunque cambien los protagonistas: “como reflexión general, quiero marcar que es un proyecto que define una estructura electoral, como ya se dijo más acorde con las necesidades del Ejecutivo. (…) Esto ya se dijo muy bien: si a Larreta y a Macri les conviene, las elecciones van a ir juntas; si a Larreta y a Macri no les conviene, van a ir separadas. ¿Quiénes deciden? Larreta y Macri. Esto es algo así como inclinar la cancha”. | 
