Se trata de la mayor alza desde abril, cuando el gasto aumentó un 33 por ciento, mostraron el martes datos del Ministerio de Finanzas.
En los primeros ocho meses del año, el gasto fiscal aumentó un 14,8 por ciento a 10 billones de yuanes (1,57 billones de dólares) comparado con el mismo período del año pasado.
China está intentando elevar el estímulo fiscal para fortalecer el crecimiento a corto plazo y protegerse contra las presiones deflacionarias, en momentos en que su economía da muestras de un menor crecimiento respecto de las tasas promedio de los últimos años. Recientemente se ajusto el crecimiento del año pasado de 7,4 a 7,3 por ciento y este año se estima alcanzaría un 7 por ciento.
Entre enero y agosto, el gasto en educación aumentó un 15,8 por ciento, un 19,5 por ciento en servicios de la salud, un 22,7 por ciento en conversión de energía y tecnología limpia y un 21,7 por ciento en seguridad social y empleo.
Sin embargo, el tosco proceso presupuestario de China, y en ocasiones las relaciones tensas con algunos funcionarios de los gobiernos locales, aún parecen estar complicando el proceso para convertir un mayor gasto en actividad real.
Las autoridades chinas han recuperado hasta un billón de yuanes (157.000 millones de dólares) de los gobiernos locales que no pudieron utilizar sus asignaciones presupuestarias, afirmó un informe de Reuters.
La enorme infrautilización, ligada a la renuencia de los funcionarios de gastar en proyectos de alto costo mientras las autoridades luchan contra la corrupción, apoya el argumento de algunos economistas de que la inversión estatal china ha crecido muy lentamente este año.
Los ingresos fiscales aumentaron un 6,2 por ciento en agosto respecto al mismo mes del año anterior y se han incrementado un 7,4 por ciento en los primeros ocho meses del 2015 frente al mismo lapso del año anterior, según los datos.
Fuente: Reuters/Redacción La Izquierda Diario |