En este especial presentamos tres notas que abordan la problemática del transporte de pasajeros en el Área Metropolitana de Buenos Aires, para dar cuenta de cómo la conversión de un servicio público en un negocio para algunos empresarios deterioró las condiciones de viaje para los usuarios y las de trabajo para quienes garantizan cada día el servicio. ¿Cuál es la salida para este sector en crisis?

Las estaciones de Constitución, Retiro y Once y otros puntos clave de la Ciudad de Buenos Aires son todos los días el escenario de la llegada de millones de bonaerenses desde distintos puntos del Conurbano (1), que bajan de trenes o colectivos que los traen desde sus ciudades o barrios de residencia, para luego tomar otro medio de transporte hasta sus lugares de trabajo. Esta escena se repite cotidianamente, y se suma al gran caudal de vehículos particulares y combis que transitan las autopistas con el mismo objetivo.

Año a año se va perdiendo cada vez más la definición clara de cuáles son las horas pico en las que tanto las autopistas y calles como los trenes y colectivos se saturan y se hace más dificultoso llegar a destino en el AMBA; algunos analistas estiman que puede considerarse hora pico prácticamente toda la franja que va de las 7 de la mañana a las 8 de la noche, de lunes a viernes.

Detrás del problema de viajar a través de un gran conglomerado como el que conforman la capital del país y la serie de cordones que la circundan, subyace un desarrollo urbano (3) donde el rol del Estado oscila entre la desidia y el favoritismo hacia el capital privado, y donde las prioridades están lejos de resolver el problema estructural habitacional y se centran en el impulso de barrios cerrados dirigidos a la franja con mayor poder adquisitivo de la sociedad. El transporte de pasajeros no escapa a este entramado en el que hay complicidades cruzadas de funcionarios de estamentos nacionales, provinciales y municipales, empresarios que se enriquecen a costa de acaparar subsidios e invertir lo mínimo posible, e incluso algunos sectores de la dirigencia sindical, que nutren con representantes propios algunos ministerios o directamente son dueños de empresas de transporte que ganan sospechosas concesiones.

Con el tema del transporte público puesto nuevamente sobre el tapete tras el fallecimiento de un chofer de la línea 620 y el reciente lock out de las patronales de colectivos para evitar la reducción de subsidios que reciben, La Izquierda Diario publica en este dossier tres notas dedicadas a analizar desde distintos ángulos la problemática del transporte en el AMBA, que invitamos a leer y difundir a nuestros lectores.

Notas:

El costo invisible del transporte: vivir viajando Leer

Viajar en el AMBA: negocios millonarios para algunos y mal servicio para millones Leer

Un transporte al servicio de las trabajadoras y los trabajadores Leer

1. Nos referiremos como conurbano al área que circunda la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, también denominada Gran Buenos Aires, y conformada por 14 partidos de la Provincia de Buenos Aires.
2.Al mencionar desarrollo urbano incluimos la edificación de barrios con sus servicios y el transporte que los comunica con los lugares de trabajo, estudio y esparcimiento.