La reaccionaria reforma judicial de Gerardo Morales empezó con escándalo. En el orden del día que les fue entregado a los y las convencionales constituyentes están guionadas las maniobras destinadas a callar al Frente de Izquierda Unidad.
Con total impunidad, en el texto entregado se lee “A consideración del reglamento en general y en particular. Votación Por signos: aprobado. (ACÁ PUEDE PEDIR LA PALABRA EL FIT…HAY QUE ORDENAR CON MOCIONES DE ORDEN Y CORREGIR EXCESOS. APARTAMIENTO DEL TEMA O FALTA DE RESPETO A PRESIDENCIA O AL CUERPO)”
Esa censura también quedó plasmada en la mañana de este lunes. En la sesión preparatoria, en el momento en que Alejandro Vilca pidió la palabra para expresar el voto negativo del Frente de Izquierda Unidad sobre las autoridades propuestas, directamente no se lo dejó hablar.
Sin embargo, las maniobras destinadas a la censura no terminan aún. En la propuesta de reglamento, el radicalismo de Morales quiere establecer que la reforma se apruebe por mayoría simple. Con este esquema, el oficialismo tiene los votos para aprobar la reforma. Así, todo el debate que pueda haber queda reducido a una formalidad.
Se ratifica que se trata de un circo donde miles de electores y electoras que no votaron ni al oficialismo ni al PJ, que garantizó -recordemos- el voto necesario para que el llamado a esta reforma parcial sea aprobado, se quedan sin ninguna posibilidad de decidir sobre la constitución. Una verdadera burla a la llamada voluntad popular, que se expresó en las urnas.
Al mismo tiempo, en el reglamento se establece la posibilidad de expulsar convencionales por simple mayoría. De esta forma, Morales se da las herramientas para sancionar a todos aquellos sectores que los desafíen en medio de la convención. Todo parece indicar que el primer blanco de los ataques será el Frente de Izquierda Unidad, que denunció el carácter reaccionario de la reforma desde el primer día.
En el inicio de la jornada, en su discurso de apertura, Morales volvió a confirmar ese carácter reaccionario, afirmando que “los cortes de rutas y calles no son derechos, son delitos”. Esta es la explicación central de los mecanismos montados para silenciar al Frente de Izquierda Unidad.
Es tan evidente el circo montado alrededor de la Convención que el mismo Morales, luego de haberse hecho nombrar Presidente de la Convención, se tomó licencia de la misma. |