Desde la mañana temprano, un centenar de trabajadores y trabajadoras contratistas de viña se concentraron en la Ruta 7 en el este provincial, donde realizaron un corte para visibilizar su lucha por el salario.
Exigen que el sindicato convoque a asambleas abiertas para discutir un plan de lucha por un aumento de 120 % de la mensualidad que reciben. Mientras la Canasta Básica en Mendoza supera los $ 180.000 y los alimentos aumentaron un 113 % en el último año, una familia contratista de la provincia que trabaja 10 hectáreas de viñedo cobra una mensualidad por debajo de los $ 50.000.
El corte de ruta se decidió luego de que fueran convocados por el sindicato para discutir las paritarias y cuando llegaron este martes a la sede, estaba cerrada.
Las y los contratistas autoconvocados están exigiendo un aumento que lleve la mensualidad a $ 10.000 por hectárea trabajada, lo que llevaría el salario a $ 100.000. En la tierra del sol y el buen vino, quienes trabajan la tierra y hacen posible la vendimia, junto al resto de las y los trabajadores de viñas y bodegas, son los peores pagos. Con esos sueldos, es imposible vivir y hacer frente a la inflación descontrolada que cada día golpea sobre el bolsillo de las familias trabajadoras de la provincia.
También se hicieron presentes muchas mujeres contratistas, quienes son invisibilizadas por un convenio que no reconoce su trabajo, cuando hacen las mismas tareas que los varones, dejándolas no solamente sin un sueldo formal sino que también sin la posibilidad de acceder a una jubilación.
En Mendoza, un legislador cobra mensualmente lo que 10 familias contratistas, como denunció Lautaro Jiménez, precandidato a Gobernador por el Frente de Izquierda, quien se solidarizó con el reclamo. |