Este viernes, el ex funcionario de Patricia Bullrich presentó un abogado defensor en la causa que investiga el atentado contra la vicepresidenta Cristina Fernández. Milman, no estaba hasta el momento imputado en la causa, por decisión del fiscal Rívolo. Pero con su actual decisión, realiza una especie de "autoimputación".
Se trata de una maniobra habitual con la que figuras o instituciones con poder señaladas en la participación de ciertos delitos, la utilizan para tener acceso al expediente de la causa y cuestiones vinculadas a la investigación.
La misma jugada había sido realizada por el gendarme Emmanuel Echazú de la Gendarmería en busca de impunidad, cuando se investigaba a esa institución y (se señalaba al gendarme) por su participación en la desaparición y posterior muerte del jóven Santiago Maldonado, tras un operativo ilegal de esa fuerza en Río Negro.
Casualidades, o quizás no tanto, el abogado elegido por Milman en la causa que investiga el magnicidio es el mismo que el de aquél gendarme. A la vez figura como letrado de Gendarmería Nacional.
La jugada de Milman a la vez muestra un cambio de estrategia por parte del ladero de Bullrich. De negar por completo cualquier tipo de vínculo con el atentado de CFK, su "autoimputación" responde, por un lado al reciente pedido de la vicepresidenta para que no se eleve a juicio la causa hasta no profundizar en la "pista Milman". Por otro, a declaraciones de su ex asesora Ivana Bohdziewicz quien afirmó haber borrado los datos de su teléfono antes de ser peritados por pedido de Milman y Bullrich. |