Tras los pobrísimos resultados en las elecciones provinciales, con Tucumán como caso emblemático, el golpe esta vez vino del lado de sus acuerdos y alianzas. Guillermo Britos, ex comisario y actual intendente de Chivilcoy promotor de la mano dura y cercano a Sergio Massa, rechazó la anunciada candidatura a gobernador por la provincia de Buenos Aires. Con estos sucesos, la Libertad Avanza transita una crisis que pone en duda los pronósticos de encuestadoras y el peso que dado en los medios de comunicación.

En lo que implica un nuevo golpe para Javier Milei y su espacio político La Libertad Avanza, el ex comisario y actual intendente de Chivilcoy, Guillermo Britos, anunció en una conferencia de prensa que “La etapa con La Libertad Avanza está cerrada”. El rechazo del ex comisario se da luego de haber sido anunciado por el partido “libertario” como su candidato a gobernador, y se produce en una fecha clave del calendario electoral, la presentación de las alianzas para las PASO.

Tan sólo días atrás, consultado sobre el tema, Milei, dando a entender lo avanzado de la negociación, había afirmado que “estamos trabajando para ponerle el moño”. Pero aparentemente "regalado y con moño" terminó el “libertario”.

Se trata de un nuevo golpe a pocos días del sufrido en las elecciones de Tucumán el último domingo. Allí, Ricardo Bussi, hijo del genocida Antonio Bussi, se presentó para gobernador con el acompañamiento y apoyo explícito del líder libertario. Recorridas, fotos, eventos y conferencias de prensa conjuntas de Milei y el negacionista partido de Bussi, fueron parte de la campaña en la provincia del norte argentino. Los resultados del domingo le dieron a Bussi menos de un tercio del porcentaje que había conseguido cuatro años atrás yendo solo.

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Ese golpe, sumado a otras performances pobres de los aliados de La Libertad Avanza en provincias como La Rioja, Neuquén, Misiones y Río Negro, entre otros distritos, encendieron las alarmas en el espacio ultra derechista. Con los magros resultados provinciales y el revés actual en el distrito electoral más importante, las sombras de una crisis parecen empezar a invadir el espacio “libertario” a menos de dos meses de las primarias.