Esta victoria desplazaba, parcialmente, a la sección sindical de la Confederación de Trabajadores de México (CTM), el sindicato Miguel Trujillo, que llevaba más de una década al frente de la planta y con quien se vivió el desarrollo de múltiples abusos, en donde los intereses de la base trabajadora eran ignorados por el grupo del charro Tereso Medina, quien ensanchó sus bolsillos a costa de las cuotas sindicales sin dar ningún tipo de apoyo a las y los trabajadores, donde también fungió como sirviente de los patrones para reprimir, amenazar, y permitir políticas anti obreras.
La llegada de SINTTIA significó la posibilidad de recuperar la dignidad y contrarrestar el olvido en el que se tenía a casi 7 mil obreros en el Bajío. Incluso el gobierno de la 4T con la hoy secretaria de gobernación, María Luisa Alcalde, se dio el lujo de publicar en sus redes la llegada del SINTTIA como consecuencia de la Reforma Laboral del 2019, y enalteciendo los acuerdos del T-MEC en donde en apariencia se garantiza la democracia sindical. Como si echar a la CTM fuese parte de la política de la Secretaria de Trabajo y Previsión social, y no del hartazgo de miles.
Al contrario, la CTM ha sido cimiento para garantizar estabilidad laboral al gobierno de la 4T manteniendo la “paz laboral”, garantizando la explotación y las ganancias. Este gobierno no hizo nada antes, ni después por las y los trabajadores de General Motors. Es el mismo gobierno que fue cómplice de la muerte de al menos 18 compañeros por Covid-19 cuando por órdenes del presidente AMLO se reabrió la industria automotriz el 15 de mayo del 2020, en medio del pico más alto de la pandemia, sin condiciones de salud e higiene. Demostrando que tanto -para gobierno como patrón- era más importante la producción que las vidas.
Pero a un año y medio de gestión del Comité Ejecutivo actual ¿llegó la democracia a General Motors Silao con SINTTIA?
Considerando 5 puntos importantes respecto a cómo era la vida político-sindical en GM con la CTM y ahora con SINTTIA en temas de democracia, representación y participación política, se puede hacer una comparación con lo que más resalta:
●Con la CTM no había ningún tipo de diálogo entre dirigentes y base, por lo tanto, no se podían resolver los asuntos que afectaban a las personas.
Hoy con el SINTTIA las cosas son casi iguales, en ocasiones escuchan los representantes, pero prácticamente nunca atienden las peticiones de los agremiados.
●La CTM no daba formación ni capacitación sindical. Esto porque si las y los trabajadores estuvieran informados sobre sus derechos y obligaciones comenzarían a pensar la importancia de defender y luchar sus derechos como trabajadores.
Hoy con SINTTIA, si hay ciertas capacitaciones sindicales, pero son limitadas a pocas personas, normalmente grupos de 30 personas, cuando la planta es de más de 6 mil.
●Una de las características principales de los charros cetemistas es que no hay ningún tipo de democracia, ellos se imponen sin importar nada, eligen a quienes les sean más serviles y les dan los puestos de representación.
Hoy con SINTTIA, tampoco hay democracia. El Comité Ejecutivo fue elegido a dedo por “asesores” por un periodo desconocido, argumentando que “se lo ganaron”. Para los “creadores” del sindicato no se debe de elegir a los representantes mediante asambleas y elecciones libres, para ellos basta con considerar que se lo merecen y ya. Esta manera de poner representantes sindicales no tiene nada que ver con la democracia obrera, pues no se trata de méritos, se trata de la decisión de la mayoría de las y los obreros.
●Otra particularidad de la CTM y los charros, es que las asambleas nunca llegan o en ocasiones hacen alguna controlada para simular u obligar a la base a tomar una decisión sin que previamente sean informados.
A un año y medio, con SINTTIA tampoco llegaron las asambleas. La dirección ha intentado realizar dos asambleas controladas, en donde no se involucra a la mayoría ni se garantizan espacios, ni trabajo de base previo para que asistan los miles de trabajadores de la armadora. Esta forma de actuar alejada de las líneas de producción, no despierta el interés de la base trabajadora y por lo tanto, no alcanzan el cuórum cuando intentan realizar las asambleas.
●Un sindicato que busca ampliar sus horizontes para llegar a otros centros de trabajo debe de discutir su expansión con la base trabajadora. Esto debido a que se generan gastos, y a que el fortalecimiento del sindicato debe de ser el fortalecimiento de su base. La expansión debe de partir de importantes discusiones democráticas en asambleas generales en donde se inviten a los trabajadores de los otros centros para poder saber qué es lo más importante y lo mejor para ellos y así llegar a acuerdos entre la mayoría para que se auto organice la fuerza obrera.
Hoy los “asesores” de SINTTIA están desplegando una campaña expansiva a la planta Fraenkische, sus consignas son: “ya llegó la hora del cambio” “Que los dirigentes sindicales sean trabajadores como tú”, entre otros. Esto es contradictorio con lo que hacen en GM Silao en donde “la hora del cambio” no llegó, pero ahora están diciendo que sí. Nadie dentro de GM Silao ha sido invitado a ningún tipo de reunión o se ha invitado a asamblea para discutir la política sindical que se llevará a Fraenkische, de igual forma, nadie de la base trabajadora en Fraenkische ha sido invitado a una reunión o asamblea, todos estos acuerdos los hacen los “asesores” con un pequeño grupo sin que nadie se entere.
Es por esto que en los hechos se le oculta a la gente los planes que tienen los dirigentes hacia afuera. No se actúa de manera democrática con los trabajadores, se aprovechan del hartazgo con los charros cetemistas para decir que viene el cambio, ¿cómo prometen democracia en otros lugares y “que los dirigentes sindicales sean trabajadores como tú” cuando en GM no se ha llevado a cabo una elección democrática de sus dirigentes?
Otra de las promesas con las que SINTTIA llegó a GM fue que pagarían los Paros Técnicos al 75%, pero eso tampoco ha pasado y no dicen nada al respecto. Los Paros Técnicos no deben de pagarse ni al 50% ni al 75%, se deben de pagar al 100%, las familias no deben de pagar las consecuencias de una crisis global provocada por los grandes multi millonarios.
También han desarrollado una lamentable práctica que tiene que ver con la censura, tanto en redes cómo FaceBook y WhatsApp, cualquiera, incluyendo a los propios agremiados, que cuestionen, se opongan o den su opinión y no sea del agrado del Comité Ejecutivo o de los “asesores” es señalado. Todo aquel que cuestione es expulsado, bloqueado, censurado o tachado de cetemista por los dirigentes.
Este análisis a un año y medio del cambio del sindicato, sirve para saber en dónde es que se encuentra la vida político-sindical de nuestro país en un contexto en el que, según los más crédulos, la Reforma Laboral 2019 y el T-MEC traerían lo que tanto se ha arrebatado a la clase trabajadora del país: democracia, dignidad y bienestar. Pero históricamente las mejoras laborales no vienen de los cielos, viene de procesos de lucha, de democracia, de auto organización y sobre todo de independencia política de las y los trabajadores con respecto del gobierno y de los patrones.
Estos instrumentos del gobierno nacional y el pacto con Estados Unidos solo han permitido, en muy pocas plantas que salgan los charros cetemistas, sin embargo esta “renovación de la vida sindical” sigue manteniendo los bolsillos de millones de familias en el país en la miseria y con una inflación de precios que en pocas ocasiones permite llegar a fin de mes.
En 2021 la Secretaría del Trabajo y Previsión Social junto a observadores estadounidenses del T-MEC, entrevistaron a distintos trabajadores de GM, quienes informaron sobre los abusos y condiciones de inseguridad de la planta, estas personas se tomaron fotos “democráticas” por el proceso de legitimación abordaron sus aviones y nunca volvieron. Hoy las y los trabajadores de GM Silao, tienen que seguir despidiendo a sus compañeros lesionados, heridos, fallecidos y despedidos por organizarse, que salen de la planta sin ningún tipo de garantías para ellos ni para sus familias, siguen soportando turnos de más de doce horas para garantizar millonarias ganancias a una empresa que les paga un salario miserable y que encima les cobra los Paros Técnicos.
Es importante darse cuenta que la salida de los charros cetemistas significa un triunfo, es un avance para la base trabajadora, pero es parcial porque no se avanzó en las formas democráticas, ni en la consulta de la base trabajadora, ni su impulso para fortalecer al sindicato a partir de preguntar la opinión hasta del último trabajador en el puesto más lejano y así fomentar la auto organización. En SINTTIA todo lo definen los “asesores” y una parte del Comité Ejecutivo.
La salida a los problemas de la clase trabajadora no se encuentra en las urnas de las STPS ni en los acuerdos con Estados Unidos, quien es el administrador de la propia planta: La democracia y la dignidad obrera solo se pueden encontrar en la auto organización de las y los trabajadores en asambleas amplias, democráticas e independientes, como lo demostraron los trabajadores de GM San Luis cuando detuvieron la producción para exigir se les pagara el día correspondiente en 2022, o como lo demostraron los trabajadores de Mazda Salamanca el mes pasado cuando se negaron a aceptar el robo de sus utilidades por parte de la automotriz japonesa, se tiene que aprovechar esos movimientos para construir corrientes democráticas e independientes que luchen por los intereses de las mayorías. Ese camino es el que puede encaminar a conquistar direcciones verdaderamente democráticas en los sindicatos, los cuales tienen que servir a la clase trabajadora y no a un grupo selecto de “asesores iluminados” o de charros. |