Para enfrentar a la derecha, se necesita una izquierda consecuente. Es esta la izquierda que queremos construir en la agrupación anticapitalista Vencer, una que busque politizar a sus pares en nuestros lugares de estudio y trabajo, que luche contra la precarización laboral y los ataques a las y los trabajadores, que enfrente a la derecha en las aulas, en las fábricas y en las calles. Que levante las demandas por educación gratuita, de calidad, democrática, laica y no sexista; por educación sexual integral; por aborto libre, legal, seguro y gratuito; por un sueldo mínimo acorde a la canasta básica; que defienda los métodos de la democracia directa y cargos mandatados, que son la tradición del movimiento estudiantil. |
La coyuntura es compleja, se encuentra en curso un proyecto de restauración de la burguesía, que busca cerrar la crisis abierta en 2019, con un segundo proceso constituyente fraudulento que tiene al partido republicano a la cabeza. Mientras sucede esto, la derecha hace campaña demagógica por seguridad, reforzamiento de las policías y fuerzas armadas, para así fortalecer al aparato represivo, se muestran abiertamente anti inmigrantes, anti mujeres, anti disidencias y anti pobres, bombardeando ideológicamente a través de sus medios de prensa y redes sociales contra estos sectores para promover la discriminación, el miedo y el odio, a la vez que fortalecen los rasgos más conservadores de la población.
El gobierno por su lado, ha renunciado a su programa para integrarse de lleno a la centroizquierda burguesa y el Partido Comunista se ha subordinado a este nuevo esquema de coalición, pactando Apruebo Dignidad con la ex concertación y la derecha para negociar las medidas políticas y las reformas en el parlamento en pos de la gobernabilidad.
Las juventudes de gobierno, lejos de ser un factor por izquierda al interior de su corriente o en el movimiento estudiantil, se han volcado a las campañas electorales para fortalecer a sus partidos al interior del aparato estatal, como táctica de presión al régimen y método único para “enfrentar a la derecha”. Pero los resultados de las últimas elecciones dan cuenta de la emergencia de el partido republicano ultraconservador y, para reubicarse, ahora la JJCC y el FA buscan retomar sus cargos en los organismos estudiantiles como centros de estudiantes y federaciones, como parte de su estrategia reformista, pero también para presionar por mejores acuerdos con la derecha en el gobierno y parlamento.
No se puede confiar en los partidos de gobierno que han abandonado hace tiempo cualquier perspectiva de lucha real y desde las bases. En el movimiento estudiantil, lejos de llamar a asambleas y plantear discusiones políticas desde sus posiciones en los organismos como los centros, federaciones y la CONFECH, incluso desde sus grupos en las universidades, colegios o liceos, han mantenido un silencio incómodo frente a la represión y a las derechadas de su gobierno.
Se han abstenido de los debates más importantes para no dar caldo que pueda perjudicar al gobierno y su pacto de gobernabilidad, incluso a costa de abandonar a su suerte a los sectores movilizados de estudiantes secundarios y universitarios y también de trabajadores de la educación y de la salud.
Un ejemplo se encuentra en la polémica de la federación de estudiantes de la Universidad Alberto Hurtado, donde estudiantes de las Juventudes Socialistas votaron por la derecha para las vocerías de la CONFECH en el zonal metropolitano a “espaldas” de la Jota, quienes también eran parte de la federación pero que no participaron de la votación. Las juventudes comunistas antes de hacer un escándalo y bajar la discusión a la base, politizando a la base con un problema político importante, respecto de quienes dirigen al máximo organismo estudiantil donde la derecha se ha asegurado una vocería, prefieren publicar un comunicado renunciando a su cargo para no hacerse más atados. Estos métodos no responden a la democracia directa y por el contrario, responden a la maniobra política, puesto que la apuesta importante es hacia las campañas por la FECH.
Las juventudes comunistas felicitan a las fuerzas armadas porque el gobierno las desplegó frente a la crisis del sistema frontal y pretenden que la lucha por los derechos de la comunidad LGBTTIQA+ se defender yendo a ayudar a la gente afectada por las lluvias, en vez de intervenir en la marcha y enfrentar los ataques de la derecha, pero se les olvida el voluntarismo para conmemorar el natalicio de Allende, para lo que sí tienen fuerzas.
Nosotros decimos que para enfrentar a la derecha se necesita una izquierda consecuente. Por eso hacemos el llamado a levantar un programa de independencia al gobierno que nos permita articularnos en nuestros lugares de trabajo y estudio. Para enfrentar a la derecha necesitamos poner al centro la autoorganización en base a la democracia directa, con los métodos de la lucha de clases, para defendernos frente al ajuste que quieren pasar a nuestras familias, de los ataques a nuestros derechos básicos como el de una educación sexual integral o el aborto libre.
Los organismos como las federaciones, la CONFECH, la CUT, el Colegio de Profesores, etc., deben llamar a asambleas para discutir como enfrentar a la derecha y los ataques de los grandes empresarios, para desde ahí discutir que programa levantar y que métodos utilizar para llevar adelante esta pelea, haciendo un cuestionamiento profundo al régimen neoliberal y convocando a una real asamblea constituyente libre y soberana
Te invitamos este sábado 8 de julio a una asamblea abierta junto a trabajadores de la salud, profesores, mujeres y disidencias, de las agrupaciones de Abran Paso, Nuestra Clase, Pan y Rosas y del Partido de Trabajadores Revolucionarios, en la sede del sindicato de trabajadores de Aguas Andinas cerca de metro Franklin a las 16 hrs. |