La cumbre del Mercosur finalizó con un documento que firmaron los presidentes Lula Da Silva (Brasil), Alberto Fernández (Argentina), y Mario Abdo Benítez (Paraguay), pero no lo firmó Luis Lacalle Pou (Uruguay) porque hubo diferencias sobre flexibilizar los acuerdos extrazona. En esta cumbre se oficializó la transferencia de la presidencia pro tempore a Brasil.
El documento indica que “los presidentes coincidieron en la necesidad de abrir un espacio de reflexión política sobre la modernización del bloque, incluyendo el fortalecimiento de la agenda interna para una mayor integración de sus economías, así como la estrategia de inserción internacional, sobre una base consensuada y solidaria”.
Además, el documento firmado por la mayoría de los presidentes del bloque comercial señala que “convinieron en trabajar para fortalecer la cohesión interna del bloque, donde aún se observan distintos tipos de dificultades para el comercio y la integración, profundizar su inserción comercial internacional y articular mecanismos que favorezcan la formación de cadenas de valor regional e inter regional sustentables, justas y resilientes”.
En tanto, los presidentes del bloque comercial exigieron a la Unión Europea avanzar en un acuerdo de libre comercio "justo y equilibrado". El macrismo con el discurso de “volver al mundo” firmó el acuerdo entre la Unión Europea (UE) y el Mercosur para reforzar la dependencia, que beneficiaba a los capitales europeos en la mayoría de los rubros, pero nunca entró en vigencia.
El presidente de Brasil, Lula Da Silva, afirmó que se compromete “a concluir el acuerdo con la Unión Europea pero esperamos que sea equilibrado y a favor de la integración productiva".
El presidente Alberto Fernández declaró que "Argentina estima que el acuerdo entre el Mercosur y la Unión Europea representa una oportunidad" y agregó que se aspira a que "las negociaciones en marcha arrojen resultados equilibrados para todas las partes".
Por su parte, el presidente de Uruguay sostuvo una posición a favor de la “conformación de la zona de libre comercio” y revisar los instrumentos de inserción internacional con un enfoque “flexible”. También se manifestó a favor de avanzar en un acuerdo de libre comercio con China.
Lo que ningún gobierno discute es que estos acuerdos, sea con China, o la Unión Europea no tienen un interés de “desarrollo regional” sino que apuntan a reprimarizar las economías de América Latina y se enfocan en la exportación de materias primas, y expoliar los bienes comunes naturales acrecentando la dependencia nacional.
Con la promesa de la integración no fueron los países los que se beneficiaron sino los capitalistas. Los trabajadores no tienen nada que ganar en estos acuerdos, donde en muchos casos se promueve más flexibilización laboral para competir con la producción de otro país. Como señala Esteban Mercatante, “el comercio internacional bajo los términos del capital no opera milagros, no asegura ninguna convergencia en materia de desarrollo entre países que se caracterizan por marcadas asimetrías en su capacidad productiva por el solo hecho de que comercien entre sí. Todo lo contrario, la reducción de restricciones comerciales y aranceles asegura que los más productivos hagan pesar con todo su ventaja”.
Massa presente en la cumbre
En el marco de la cumbre del Mercosur el ministro de Economía Sergio Massa tuvo una reunión con los presidentes de Uruguay, Luis Lacalle Pou, de Brasil, Lula Da Silva; y con el mandatario de Paraguay, Santiago Peña, entre otros.
El candidato presidencial por Unión por la Patria mantuvo una ronda de encuentros sin anuncios concretos. Massa dialogó con Lula sobre el acuerdo para que el Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) financie a las empresas que participan en la construcción del Gasoducto Néstor Kirchner. Hace meses el ministro junto a Fernández plantearon también la negociación para lograr el financiamiento de las importaciones brasileñas (usando reales en vez de dólares), pero en agosto dicha entidad trataría la incorporación de Argentina.
Por su parte, Peña y Massa conversaron sobre los proyectos de Yacyretá, la Hidrovía y el Proyecto hidroeléctrico Corpus Christi.
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