Inicialmente se informó por diferentes mensajes en grupos y directos sobre que el paro respondía a una situación en la que se estaba procediendo, por parte de Recursos Humanos, a despedir a un trabajador de manera injustificada y sin el aviso al SINTTIA, el sindicato que agremia al trabajador. Así que se procedió al paro de línea como medida de presión para evitar el despido.

Hasta el momento se informó que el compañero fue despedido solo por mencionar que su coordinador dejó su puesto de trabajo para retirarse con una trabajadora, lo que ocasionó un problema de personal en la línea, así que cuando se investigó, el compañero comentó lo que vio, cosa que molestó al coordinador, quien en represalia decidió despedirlo.

Lamentablemente la inmovilidad política y el secretismo de la dirección sindical del SINTTIA y las artimañas de los charros cetemistas, que buscan cualquier oportunidad para golpear, han dado campo fértil para incertidumbre de información y hace unas horas comenzaron a viralizarse mensajes en donde se presunta que este hecho es un montaje provocado por alguna facción de la dirección sindical (que se encuentra dividida en 3) para que se le apoye de cara a un aparente proceso de elecciones que se prepara para diciembre.

De cualquier forma, es un ejemplo claro de que la base trabajadora autoorganizada puede atreverse a tomar su papel mostrando su fuerza ante la intransigencia y las cobardes acciones de despido.

Es importante que de este paro se saquen lecciones sobre la autoorganización para así poder superar los procesos antidemocráticos de las direcciones sindicales y los abusos patronales porque no es la primera vez que pasa, a pesar de que el SINTTIA llegó hace año y medio, los despidos injustificados e incluso políticos siguen siendo del día a día, ha habido despidos políticos de compañeros que se organizan y a pesar de estar los representantes del sindicato, no les han apoyado para evitar la pérdida de su fuente de empleo.

Es por esto que la organización contra los despidos debe ser para que ni una sola familia más pierda su fuente de ingreso en el Bajío se debe de defender el trabajo de todas y todos los trabajadores de la planta y solo así organizados y en lucha se puede dar frente a esta patronal represora.