Durante más de dos años de guardar total silencio, los dirigentes del Colegio de Profesores se han posicionado y han convocado a paro y se encuentran ad portas de un paro nacional indefinido debido a que el gobierno no ha dado respuestas concretas al petitorio docente.

Y es que la burocracia sindical busca reubicarse ahora ante el avance de la derecha, por un lado, y también debido a sus disputas internas. Vemos con preocupación que este paro no se transforme en una movilización para presionar por un mejor pacto fiscal, por el contrario queremos que se resuelvan todas las demandas de la educación pública.

El gobierno solo ha dado portazos a las demandas de las y los profesores. El ministro Ávila comprometió otra respuesta al Colegio de Profesores para el mismo 17 de agosto, día en el cual comienza la Asamblea Nacional que durará hasta el 18 de agosto y que votará sí los docentes van o no a paro indefinido. Esta asamblea Nacional es cerrada a los dirigentes del CdP, es decir nuevamente dejarán a las bases sin poder deliberar ni decidir.

Desde la última movilización han pasado casi dos semanas, en donde el Colegio de Profesores no ha convocado a asambleas de base en cada colegio y/o escuela para discutir cuál será el curso de la movilización. En Valparaíso ¿Porque el comunal no llama a asambleas para discutir el curso de la movilización o de mínima preparar la Asamblea Nacional? ¿Por qué no convocan a las y los estudiantes, motor fundamental para unir las luchas educativas es un gran polo? Es cosa de ver las páginas oficiales del CdP de Valparaíso, Viña del mar o el Regional, totalmente muertas sin referirse a una posición clara o proponer alguna política para las próximas movilizaciones ¡La web del CdP regional no se actualiza desde el 2022!

No podemos seguir permitiendo que nuestra lucha por la conquista de nuestras demandas sea un muñequeo más de una dirección burocrática que juega con las expectativas de las y los profesores que se movilizan mientras ellos negocian migajas como por ejemplo pidiendo por favor a los senadores que eliminen la doble evaluación.

El Ministro Ávila ha prometido otra respuesta al Colegio de Profesores, para el mismo 17 de agosto que comienza la Asamblea Nacional que es cerrada a los dirigentes del CdP. Sabemos que sin discusión del conjunto de las y los trabajadores solo hay desgaste, nuestras fuerzas se debilitan.

Es urgente realizar asambleas de base, y que sean los y las trabajadoras los que discutan un plan ascendente, y avanzar así a la unidad y organización de todos los trabajadores de la educación. En contra de la división que nos imponen los dirigentes del CdP, opongamos ejemplos de unidad y luchemos por forjar un gran frente educativo que una todas las luchas existentes en educación, como por ejemplo las trabajadoras de Integra que también se han movilizando contra los bajos sueldos, extensas jornadas de trabajo y cada vez menos horas para la planificación y preparación de actividades.
Sólo con unidad y de manera independiente al Gobierno es que podremos conquistar todas nuestras demandas.