Durante la conferencia matutina de este miércoles, López Obrador elogió el flujo de extranjeros en México, tanto en cuestiones de turismo como de residencia. Aseguró que son "el futuro" con megaproyectos como el tren Maya poniendo en el mapa destinos de visita para quienes deseen conocer el sudeste del país.

En contraposición, mencionó el caso de "los vecinos y hermanos estadounidenses, que son bienvenidos" ya no se puede comer en restaurantes de la colonia Roma y La Condesa. Añadió que "no está tan caro" comer en la Condesa.

No obstante de los beneficios que pueda traer el turismo, es engañoso hablar de residencia de estadounidenses siendo que, con los planes de la 4T para la capital, en alianza con empresas como AirBnB, lo que se va a aumentar va a ser el fenómeno del nomadismo digital, con extranjeros residiendo temporalmente unos días o meses rentando departamentos mientras la ciudad ofrece servicios rápidos en detrimento de quienes habitamos cotidianamente la ciudad y que vemos encarecerse todos los servicios de la zona, los cuales por supuesto pueden pagar esos nómadas digitales mientras los mexicanos seguimos teniendo un salario que apenas alcanza, pactado por el gobierno como parte del neoliberal T-MEC.