La protesta de les estudiantes secundarios se da en el marco de una profunda crisis presupuestaria de la educación pública cuya política gubernamental sigue manteniendo el subsidio a instituciones privadas. En el caso de nuestra provincia, muchas de esas instituciones son religiosas como sucedió durante pandemia, momento en el cual la gobernadora Arabela Carreras le otorgó un millón de pesos a un colegio religioso en calidad de subsidio extra.
En este marco, los colegios secundarios de Cipolletti vienen manifestando su derecho a estudiar en condiciones dignas y que el colegio represente un espacio acogedor de habitabilidad, no un lugar de despojo y desidia. Así lo expresaron también estudiantes del colegio ESRN 5 de la misma ciudad, quienes la semana pasada también realizaron una protesta en su colegio para visibilizar la situación deplorable en la que estudian día a día.
Por su parte jóvenes del colegio 35, ofrecieron una entrevista a nuestros corresponsales para dar cuenta en primera persona de su situación:
Chiara Peroni sostuvo que “realizamos una sentada en el ESRN 35 por las condiciones edilicias que hay en el colegio al día de hoy, como por ejemplo techos rotos, ventanas rotas, calefactores que no funcionan, y si funcionan cuando los prenden largan un olor horrible como a muerto. Bueno todo eso; como centro de estudiantes estamos realizando propuestas que también tienen que ver con el arreglo del colegio”, y agregó que “tenemos pensado seguir realizando estas protestas, y estamos organizando marchar al concejo de educación todos juntos para que nos den una respuesta”.
Juana Sosa también es estudiante de la ESRN 35 quien nos comentó que “todos los años hacemos sentadas por este tema de la calefacción, porque caen heladas y no se puede estar en los cursos, nosotros hemos venido con mantas, camperas, lo que sea y otros años los directivos nos han dicho que vengamos más abrigados y que ellos no se responsabilizaban por las enfermedades que tuviésemos.”
También las estudiantes manifestaron que se están organizando junto a padres y entre los cursos ante la falta de respuesta de las autoridades del consejo de educación; a través de rifas para juntar dinero. No obstante van a seguir organizados para seguir exigiendo un espacio educativo acorde a su bienestar. | 
