Los tres sindicatos más importantes de Italia han convocado este lunes a una huelga general, aunque solo de ocho horas, en la provincia italiana de Vercelli (Piamonte, norte) para protestar por la muerte de cinco trabajadores arrollados por un tren cuando hacían labores de mantenimiento en las vías cerca de Turín (norte) el pasado jueves.
Además del paro, al que se han sumado los sectores del transporte y la construcción de toda la región de Piamonte, los líderes de los sindicatos CGIL, CIOSL y UIL han marchado por las calles de Vercelli junto a los familiares de las víctimas, que llevaban los retratos de los cinco fallecidos, cuya muerte ha conmocionado al país.
Unas dos mil personas, entre ellas delegaciones de todo el Piamonte y ferroviarios jubilados de la cercana región de Lombardía, han recorrido en silencio, bajo el lema "No nos quedan palabras", las calles de la ciudad, desde la estación de tren hasta la Prefectura, donde se han leído los nombres de las víctimas.
"Todo recae sobre la piel de los trabajadores, es el momento de decir basta y de cambiar. Hemos hecho huelgas, pero tenemos que elevar aún más el nivel de la protesta", dijo en la marcha el secretario general del sindicato italiano CGIL, Maurizio Landini.
El accidente de Bernizzo ha conmocionado a Italia, un país con un alto índice de siniestralidad laboral. Y ese índice está directamente relacionado con el aumento de la precarización laboral y la subcontratación. Ambos fenómenos, que deterioraron las condiciones laborales y de seguridad de los trabajadores, son producto de décadas de ataques de parte de las cámaras empresarias que fueron dejados pasar por los principales sindicatos.
La fiscalía investiga al supervisor que se encontraba en el lugar, junto a la estación de Brandizzo por su posible implicación en la mala comunicación que dio origen a la tragedia. Sin embargo, varios medios publicaron testimonios de trabajadores denunciando que era común que hicieran tareas de mantenimientos en esas condiciones poco seguras, por lo que un asesinato laboral de este tipo podría haber tenido lugar en cualquier momento, y pueden seguir ocurriendo mientras las ganancias de las empresas valgan más que las vidas obreras. |