Desde distintos puntos de vista, pero bajo la misma bandera. Desde el Partido Comunista, pasando por Convergencia Social, la Democracia Cristiana, la UDI, hasta el Partido Republicano, celebran las fiestas patrias y engañan al pueblo bajo la consigna de la "unidad nacional".
No es casualidad que todos estos partidos, todos integrados al régimen capitalista chileno, llamen a festejar para el 18 de septiembre a la supuesta "patria de todos", una fiesta que no es más que pura ideología burguesa a la vena durante días para que la clase trabajadora sienta que hay algo que los une a sus explotadores: la patria.
Claro que uno puede esperarse un saludo patriótico de los partidos de derecha, como la UDI que hizo un video sin escrúpulos desde la tumba de Jaime Guzmán hablando nuevamente "del amor", cuando son un partido que nació al calor de las violaciones a los derechos humanos, asesinatos, torturas y desapariciones de la dictadura.
Pero más o menos igual de vergonzoso es que el mismo llamado a festejar las fiestas patrias sea algo compartido por el Partido "Comunista", quiénes además dan unos hipócritas "saludos revolucionarios".
Las y los trabajadores y el pueblo pobre no tienen patria, pero parece que los "comunistas" del PC se saltaron esa página del Manifiesto Comunista de Marx, así como también se saltaron toda la teoría marxista del Estado y solo buscan pequeñas migajas a través de la conciliación de clases y el Estado Burgués. Este "patriotismo revolucionario" es el que los lleva a ser parte del gobierno que más ha invertido en la institución de Carabineros en toda la historia de Chile. Un partido del orden y de la patria.
No hay nada que pueda unir a la clase de los explotados con la de los explotadores: ni una bandera, ni un himno, ni la patria. La clase trabajadora es la misma en todos los países y debe unirse para combatir a la burguesía, quiénes son los verdaderos beneficiados por la ilusión de "la unidad nacional" y proclaman esta idea cuando están acorralados, como cuando los partidos del régimen firmaron el Acuerdo por la Paz en 2019, con Boric a la cabeza, para salvarle el pellejo al -ahora"demócrata"- violador de derechos humanos Sebastián Piñera.
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