Poco antes de las 14.00 horas de este martes, finalizaba Alberto Núñez Feijóo, líder del Partido Popular (PP), su discurso de investidura como Presidente ante el Congreso de los Diputados. Sin haber reunido los apoyos necesarios, ya que cuenta con 172 diputados de los 176 que conforman la mayoría necesaria, el líder derechista lanzó un discurso en clave electoralista y de oposición frente a un Gobierno del PSOE de Pedro Sánchez y Sumar que las derechas ya dan por hecho.
Con su investidura derrotada de antemano y nada más comenzar, Feijóo cargó contra la posible amnistía a los políticos catalanes encausados por el 1 de octubre de 2017. Reivindicándose como el ganador de las elecciones del pasado 23 de julio, mencionó que, si no va a gobernar, es porque no acepta la amnistía ni las condiciones de Junts, el “aro” por el que sí estaría dispuesto a pasar Pedro Sánchez.
“Me siento representante de otros ciudadanos que el 23 de julio votaron a partidos que tampoco llevaban en sus programas: ni amnistía, ni autodeterminación, ni ninguna otra fórmula equivalente o análoga. Me debo a todos ellos. Me debo a quienes clamaron igualdad este domingo en las calles de Madrid. Me debo a la mayoría de los españoles”, decía el líder derechista en referencia a la movilización convocada por el PP contra la amnistía y el derecho democrático a decidir.
En este sentido, Feijoo ha hablado de introducir un nuevo delito de “deslealtad constitucional”, que, sin entrar en detalles, vendría a sustituir al delito de sedición y que, en su programa del 23 de julio, el PP planteaba recuperar.
Tras remarcar su compromiso contra cualquier tipo de amnistía, derecho de autodeterminación y negociación con los partidos catalanistas, el líder del PP ha mencionado algunas medidas económicas en clave electoralista: endurecer el delito de malversación, rebajas de impuestos para emprendedores y rentas medias y bajas, la defensa del actual impuesto a la banca y otras similares a las actuales medidas del Gobierno de “escudo social” por la guerra de Ucrania. En resumen, promesas de menos impuestos y más ayudas, tratando de abordar la situación de crisis que viven millones de personas. Sin embargo, solo se trata de demagogia electoral, ya que las políticas que aplican todos los días los actuales gobiernos autonómicos liderados por el PP desmienten estas promesas. El líder del PP incluso habló de subir el salario mínimo y revalorizar las pensiones, aunque lo hizo sin comprometerse a que se haga por encima de la inflación y el IPC, por lo que, otra vez, está claro que se trata de palabras vacías.
Pocas han sido, por lo tanto, las novedades en el discurso de Feijóo, que ha reiterado su propuesta de seis pactos de Estado: Institucional, por la Economía, las Familias, el Estado de Bienestar, el del Agua y Territorial. Incorporando algunos elementos claves del discurso de la extrema derecha en el ámbito educativo o del cambio climático, algo que han festejado desde Vox a través de su portavoz parlamentaria, Pepa Millán.
Tras el discurso del líder del PP, la sesión parlamentaria se ha suspendido hasta las 15.30h, momento en el cual se retoma el debate con los distintos grupos políticos, de mayor a menor representación, hasta que este miércoles se produzca la votación. De no conseguir los apoyos suficientes (176 votos a favor), lo que es lo más probable, este viernes 29 habrá una nueva votación. Si en esta segunda oportunidad Feijóo no consigue los apoyos necesarios (más síes que noes) se terminará este intento de investidura derrotada por adelantado. A partir de entonces, comienza el juego para Pedro Sánchez. |