“Empresas de EE.UU. celebraron el fallo de la Corte a favor de la exploración offshore en Mar del Plata”. Así titulaba hace unos días un medio la noticia sobre las implicancias que tendrá el nuevo fallo de la Corte Suprema alrededor del petróleo offshore que extraerá Equinor, la multinacional noruega, en sociedad con la británica Shell e YPF, del Mar Argentino.
En su página, la Cámara de Comercio de los Estados Unidos en la Argentina (AmCham Argentina) emitió un comunicado en el que señala:
- “AmCham Argentina valora la decisión de la Corte Suprema, al dejar firme una resolución de la Cámara Federal de Mar del Plata que habilitó la exploración y explotación petrolera en el Mar Argentino".
Y no es para menos. La Corte Suprema de Justicia ―de Argentina, sí; no del país del Norte― dio vía libre al desarrollo del núcleo de exploración offshore en nuestro mar. Así, suma un nuevo capítulo en materia de extractivismo, de entrega y expoliación imperialista. Porque a tan solo a partir de 300 kilómetros de la costa, la biodiversidad estará fuertemente comprometida por las bombas de ultrasonido lanzadas para buscar hidrocarburos, también las actividades económicas que se desarrollan en ellas y no se descartan directamente desastres ambientales, como ha ocurrido en el Golfo de México.
Aquel titular debería haber agregado que también festejaron el fallo los representantes políticos del extractivismo, desde la derecha rancia negadora del cambio climático hasta los también extractivistas y negadores en los hechos, Sergio Massa y Axel Kicillof. Porque, ¿qué es si no, alentar la extracción de combustibles fósiles, cuando de lo que se trata es de disminuir su producción? Y en este caso es mucho peor dado que no se trata de pozos tradicionales sino que se realizan en el fondo del mar, afectando gravemente el entorno natural.
Por si alguna duda queda de la postura de Sergio Massa, la secretaria de Energía del Gobierno nacional, Flavia Royon, publicó en su cuenta de X:
El nuevo fallo y la lucha antiextractivista #Mar Sin Petroleras
A fines de diciembre de 2021, en medio de los enormes incendios forestales en la Patagonia, el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación aprobó el proyecto “Adquisición Sísmica 2d-3d-4d Off Shore en bloque CAN108-CAN114″. Con esta resolución comenzaban dos cosas: por un lado, la multinacional Equinor conseguía los permisos necesarios para sus actividades depredadoras en Mar Argentino; por el otro, comenzaría a desarrollarse, como respuesta, la campaña #Mar Sin Petroleras.
Esta campaña fue nucleando al movimiento ambientalista y a las comunidades costeras en los “Atlanticazos”, jornadas de concientización y lucha contra el inminente daño ambiental. Desde ese momento, se desarrollaron movilizaciones y cientos de otras acciones en todo el país, contando con el apoyo de grandes sectores, en especial de los jóvenes, del movimiento de mujeres y personalidades de la cultura.
Por otro lado, algunas organizaciones ambientales también fueron presentando pedidos ante la justicia, recursos de amparo que exigían la nulidad del proyecto y el cese de la actividad de Equinor. En estos años, #Mar Sin Petroleras se convirtió en un emblema que confluyó con otras muestras de repudio a otros proyectos extractivistas, como vimos en Jujuy alrededor del Litio, o ese mismo año en Chubut contra la "rezonificación minera" de otro gobernador peronista, Mariano Arccioni.
El rechazo de la Corte Suprema a detener la actividad offshore, las pruebas de exploración sísmica y la construcción del primer pozo petrolero en Mar Argentino, es la tercera instancia judicial, y la segunda que la “justicia” rechaza. En febrero de 2022, en Mar del Plata, el juez Santiago Martín, del Juzgado Federal N°2 dio lugar al pedido y ordenó la suspensión de la aprobación del proyecto.
Pero en diciembre pasado, la Cámara de Apelaciones (también de Mar del Plata) la dejó sin efecto. Ahora es la Corte Suprema, máximo tribunal del país, la que desestima los planteos por “no estar dirigidos contra una sentencia definitiva o equiparable a tal”. Eufemismos o vericuetos legales: hecha la ley hecha la trampa.
Justicia extractivista
Los jueces de la Corte Suprema que avalaron la continuidad del extractivismo offshore son Horacio Rosatti, Juan Carlos Maqueda y Carlos Rosenkrantz, tres de los cuatro que forman el Tribunal. Jueces que no fueron elegidos por el voto popular y que deciden por millones que tanto Equinor como sus socios en el proyecto, YPF y Shell, que tienen el 35% y 30% respectivamente del consorcio, puedan continuar con las actividades de prospección sísmica 3D de los bloques 100, 108 y 114.
Es preciso redoblar el rechazo y la movilización ante esta nueva sentencia. Tenemos que ganar las calles para enfrentar a estas multinacionales, sus políticos garantes y a la justicia que los avala. |