Más de 750 periodistas de diversos medios, incluidos el Washington Post, Los Angeles Times y The Guardian o Reuters firmaron una carta cuestionando la forma en la que los medios occidentales cubren el ataque de Israel a Gaza e instaron a los medios a utilizar términos como “apartheid” y “genocidio” en sus informes para describir la masacre que lleva adelante el Estado de Israel sobre el pueblo palestino. En la carta también condenan el asesinato de periodistas en Gaza por parte de Israel.
Bajo el título "Condenamos el asesinato de periodistas en Gaza por parte de Israel e instamos a la integridad en la cobertura de los medios occidentales sobre las atrocidades de Israel contra los palestinos", los periodistas firmaron la carta que reproducimos íntegra a continuación:
9 de noviembre de 2023
La devastadora campaña de bombardeos y el bloqueo de los medios de comunicación de parte de Israel en Gaza amenazan la recopilación de noticias de una manera sin precedentes. Nos estamos quedando sin tiempo.
Más de 11.000 palestinos han muerto en el asedio de cuatro semanas de Israel. En el creciente número de muertes se incluyen al menos 35 periodistas, según el Comité para la Protección de los Periodistas, en lo que llama el conflicto más mortífero para los periodistas desde que comenzó a rastrear las muertes en 1992. Decenas más han resultado heridos, detenidos, desaparecidos o sus familiares han sido asesinados.
Como reporteros, editores, fotógrafos, productores y otros trabajadores de las redacciones de todo el mundo, estamos consternados por la matanza de nuestros colegas y sus familias a manos del ejército y el gobierno israelíes.
Le escribimos para instar a que se ponga fin a la violencia contra los periodistas en Gaza y para pedir a los líderes de las redacciones occidentales que sean responsables en la cobertura de las repetidas atrocidades de Israel contra los palestinos.
Los periodistas en la asediada Franja de Gaza se enfrentan a grandes cortes de energía, escasez de alimentos y agua y un colapso del sistema médico. Han sido asesinados mientras trabajaban visiblemente como periodistas, así como de noche en sus casas. Una investigación de Reporteros sin Fronteras también muestra ataques deliberados contra periodistas durante dos ataques israelíes del 13 de octubre en el sur del Líbano, en los que murió el camarógrafo de Reuters Issam Abdallah e hirió a otros seis periodistas.
Las familias de los periodistas también han sido asesinadas. Wael Dahdouh, jefe de la oficina de Al Jazeera en Gaza y un nombre muy conocido en el mundo árabe, se enteró en directo el 25 de octubre de que su esposa, sus hijos y otros familiares habían muerto en un ataque aéreo israelí. Un ataque del 5 de noviembre contra la casa del periodista Mohammad Abu Hassir, de la agencia de noticias Wafa, lo mató a él y a 42 miembros de su familia .
Israel ha bloqueado la entrada de la prensa extranjera, ha restringido fuertemente las telecomunicaciones y ha bombardeado oficinas de prensa. Unas 50 sedes de medios de comunicación en Gaza fueron atacadas el mes pasado. Las fuerzas israelíes advirtieron explícitamente a las redacciones que “no pueden garantizar” la seguridad de sus empleados frente a los ataques aéreos. Siguiendo un patrón de décadas de atacar letalmente a periodistas , las acciones de Israel muestran una supresión a gran escala del discurso.
El Sindicato de Periodistas Palestinos ha instado a los periodistas occidentales a condenar públicamente los ataques contra periodistas. “[Nosotros] llamamos a nuestros colegas periodistas de todo el mundo a tomar medidas para detener el horrible bombardeo de nuestro pueblo en Gaza”, dijo el grupo el 31 de octubre en una declaración publicada.
Estamos atendiendo ese llamado.
Apoyamos a nuestros colegas en Gaza y anunciamos sus valientes esfuerzos por informar en medio de la matanza y la destrucción. Sin ellos, muchos de los horrores que ocurren sobre el terreno seguirían siendo invisibles.
Nos unimos a asociaciones de prensa, incluidas Reporteros sin Fronteras, la Asociación de Periodistas Árabes y de Medio Oriente y la Federación Internacional de Periodistas para exigir un compromiso explícito de Israel para poner fin a la violencia contra periodistas y otros civiles. Las redacciones occidentales se benefician enormemente del trabajo de los periodistas de Gaza y deben tomar medidas inmediatas para pedir su protección.
También responsabilizamos a las redacciones occidentales por la retórica deshumanizante que ha servido para justificar la limpieza étnica de los palestinos. Los dobles raseros, las inexactitudes y las falacias abundan en las publicaciones estadounidenses y han sido bien documentadas. Más de 500 periodistas firmaron una carta abierta en 2021 en la que expresaban su preocupación de que los medios de comunicación estadounidenses ignoraran la opresión de Israel contra los palestinos. Sin embargo, el llamado a una cobertura justa no ha recibido respuesta.
En cambio, las redacciones han socavado las perspectivas palestinas, árabes y musulmanas, descartándolas como poco confiables y han invocado un lenguaje incendiario que refuerza los tropos islamófobos y racistas. Han impreso información errónea difundida por funcionarios israelíes y no han examinado las matanzas indiscriminadas de civiles en Gaza, cometidas con el apoyo del gobierno de Estados Unidos.
Desde el ataque del 7 de octubre por parte de Hamás, en el que más de 1.200 israelíes, incluidos cuatro periodistas, fueron asesinados y unos 240 más fueron capturados, estos problemas se han agravado. La cobertura noticiosa ha posicionado el ataque como el punto de partida del conflicto sin ofrecer el contexto histórico necesario: que Gaza es una prisión de facto para refugiados de la Palestina histórica, que la ocupación de Israel es ilegal según el derecho internacional y que los palestinos son bombardeados y masacrados periódicamente por el gobierno israelí.
Los expertos de la ONU han advertido que están "convencidos de que el pueblo palestino corre un grave riesgo de genocidio", pero los medios occidentales siguen dudando en citar a los expertos en genocidio y describir con precisión la amenaza existencial que se desarrolla en Gaza.
Este es nuestro trabajo: hacer que el poder rinda cuentas. De lo contrario, corremos el riesgo de convertirnos en cómplices del genocidio.
Renovamos el llamado a los periodistas a decir toda la verdad sin miedo ni favoritismo. Utilizar términos precisos que estén bien definidos por las organizaciones internacionales de derechos humanos, incluidos “apartheid”, “limpieza étnica” y “genocidio”. Reconocer que distorsionar nuestras palabras para ocultar pruebas de crímenes de guerra o de la opresión de los palestinos por parte de Israel es una negligencia periodística y una abdicación de la claridad moral.
No se puede subestimar la urgencia de este momento. Es imperativo que cambiemos de rumbo.
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Los redactores de la carta son un grupo de reporteros radicados en Estados Unidos que trabajan en redacciones locales y nacionales. Algunos miembros del grupo también participaron en una carta abierta de 2021 en la que se describían las preocupaciones sobre la cobertura de Palestina por parte de los medios estadounidenses.
Todas las firmas han sido verificadas. Aproximadamente 600 periodistas actuales y anteriores firmaron la carta en el momento de su publicación el 9 de noviembre de 2023. Desde entonces, unos 300 más han firmado, lo que eleva el total a aproximadamente 900. Todas las cifras se actualizaron al 10 de noviembre de 2023.
Dos periodistas pidieron que les quitaran las firmas el 10 de noviembre a petición de su empleador, Associated Press. Esas firmas han sido eliminadas. | 
