La derecha diciendo que la amnistía va a romper España, los fachas tomando las calles con cánticos racistas y franquistas, el gobierno defendiendo que es una defensa de la convivencia entre españoles y el aparato judicial rechazando la ley antes de que se hiciera pública. ¿Pero qué amnistía han pactado?
El martes el PSOE presentó la proposición de ley y por fin supimos de qué se trataba. Pocas sorpresas: Dicen que podría afectar a 309 encausados del movimiento democrático catalán, muy pocos teniendo en cuenta que hay más de 3000. Sin embargo, incluiría a 73 policías que cometieron actos tan brutales de represión que hasta fueron encausados por ello, para que nos hagamos una idea. Deja fuera a todos los a todos los declarados ilegales por las leyes racistas y a todos los encausados por luchar. Estoy hablando de activistas contra los desahucios, por el clima, o luchadores por derechos laborales. Y trata de dar un cierre a la cuestión catalana, negando cualquier vía para el reconocimiento del derecho a decidir. Lo que llamamos una restauración “progresista” del régimen monárquico.
A pesar de todo, está recibiendo ataques de los sectores más rancios: la judicatura, el PP operando en el Senado, comunicados de la Iglesia, la patronal, la policía y la guardia civil, VOX y hasta algunos grupúsculos neonazis agitando las calles, la convocatoria ridícula de huelga general por parte del sindicato fake de VOX. Claro, preferirían su propia salida, una restauración más conservadora y que no hubiera ni un solo amnistiado.
Pero que la derecha se haya envalentonado así no cae del cielo. El propio PSOE reforzó este discurso cuando apoyó el 155 del a por ellos y las operaciones judiciales y policiales contra el movimiento democrático catalán.
Y ahora, de nuevo, todo el marco se gira a la derecha y nos intentan convencer de que la única alternativa para frenar a la derecha es conformarse con esta amnistía limitada a cambio de renunciar al derecho a decidir y apoyar esta reedición del gobierno progresista imperialista que refuerza las leyes represivas, asesina en la frontera, pacta sus medidas con la patronal y, a pesar de la retórica de hoy de Sánchez, sigue apoyando a Israel porque mantiene sus pactos y compra-venta de armas con el estado genocida y como aparece en el acuerdo firmado entre PSOE y Sumar, va a “respetar los intereses legítimos de Israel”, cita literal.
La única forma de parar a esta derecha pasa por organizarnos y movilizarnos de forma independiente, y pelear por una amnistía para todos los luchadores, por el derecho a decidir, contra sus leyes represivas y sí, por supuesto, en solidaridad con Palestina contra este gobierno que apoya a Israel. |
