Kissinger había ocupado los cargos de Consejero de Seguridad Nacional y Secretario de Estado de Estados Unidos durante las presidencias de Richard Nixon y Gerald Ford. Desde ese lugar, fue partícipe activo de los lineamientos de la política internacional norteamericana en este período. Esa labor incluyó tejer lazos entre la potencia imperialista y la China de Mao Tse Tung.
Al mismo tiempo, incluyó el accionar golpista del propio EE.UU., por ejemplo, en América Latina. De ese accionar ha dejado testimonio la historia en las fotos que compartió con dictadores genocidas como Jorge Rafael Videla y Augusto Pinochet.
Heinz Alfred Kissinger nació en Fürth, Baviera, Alemania, el 27 de mayo de 1923. Cuando tenía 15 años, en el marco de las enormes persecuciones del nazismo contra la comunidad judía, emigró con su familia a Estados Unidos. Posteriormente, estudió en la Universidad de Harvard, donde cursó Ciencias Políticas.
Desde mediados de la década del 50 integró distintos organismos ligados a la Seguridad Nacional, esencialmente como asesor. A finales de esa década, se convirtió en asesor de Nelson Rockefeller, gobernador de New York, que intentó sin éxito llegar a la presidencia en tres ocasiones por medio del Partido Republicano.
Recién en 1969, bajo la presidencia de Richard Nixon, Kissinger llegaría a los lugares más altos de la política norteamericana como Consejero de Seguridad Nacional. Desde ese lugar, fue parte activa de la gestión presidencial en los años siguientes. En estos años debió atender a las tensiones desatadas por la Guerra en Vietnam, cada vez más cuestionada al interior del propio Estados Unidos, por un movimiento anti-guerra que crecía y desafiaba al poder.
En 1972, ya durante la segunda presidencia de Nixon, Kissinger se convirtió en Secretario de Estado de los Estados Unidos, manteniéndose en este cargo hasta 1977. Desde ese lugar jugó un papel central en las políticas del imperialismo norteamericano a nivel mundial. En este período hay que contabilizar el acercamiento entre Estados Unidos y la República Popular de China, encabezada entonces por Mao Tse Tung. También la llamada política de distensión con la URSS, entonces encabezada por Leonid Brézhnev. En ese período hay que señalar también el impulso a golpes de Estado en distintos países de América Latina, destacando lo ocurrido en Chile (1973) y Argentina (1976).
Después de su salida del poder, Kissinger se mantuvo como un referente central de la política internacional en las últimas décadas. Eso le permitió estrechar vínculos con múltiples actores, gobiernos y dirigentes de la clase dominante internacional. Al mismo tiempo, sostuvo una producción de libros prolífica. Entre sus trabajos más reconocidos figuran Diplomacia (1994); Crisis: La anatomía de dos crisis de política exterior (2003); Sobre China (2011); Orden Mundial (2014) y Liderazgo - Seis estudios sobre estrategia mundial (2023). |