El Nega y Tony el sucio son Los Chikos del Maíz. Llegan por primera vez a la Argentina, tras una larga espera de sus fans que les reclamaban la visita desde las redes.sociales.
Banda emblema del hip hop español, traen por primera vez a Buenos Aires sus líricas combativas que edificaron una sólida carrera de dos décadas. En la previa del show de este 3 de diciembre, conversamos con El Nega.
Surgidos en Valencia allá por 2004, son una de las expresiones más combativas y de izquierda del amplio movimiento de rap y hip hop de la península ibérica. Apelando a una amplitud sonora que los hace exponentes de un estilo más colorido y heterodoxo, el punto fuerte del combo que componen El Nega y Tony el sucio son sus letras implacables y corrosivas que apuntan al núcleo del sistema social capitalista. A casi 20 años de aquel comienzo, cuando uno de los primeros hitos fue su EP A D10s le pido en homenaje a nuestro Diego Armando Maradona, las voces de Los Chikos del Maíz aterrizan por primera vez en Buenos Aires, en el marco de una ansiada escala en Latinoamérica de su gira Yes Future Tour 2023 con la cual están presentando su disco más reciente en el que ya desde el título enuncian la importancia de dar pelea por ese futuro a conquistar. ¿Quién dijo que todo está perdido? Los Chikos del Maíz seguramente vendrán a ofrecer su corazón pero también su actitud aguerrida sobre (y también bajo) el escenario de El Teatrito (Sarmiento 1752, CABA) cuando se asomen este domingo a las 19 hs a disparar sus gritos de combate anticapitalista en forma de canciones. Todavía hay entradas disponibles por sistema Passline.
Mientras todavía están en Chile (programaron dos fechas en Santiago y una en Valdivia), conversamos con El Nega sobre el camino recorrido, la actualidad y el futuro por el que luchan Los Chikos del Maíz.
LID - El nombre está basado en el cuento de Stephen King “Los chicos del maíz” ¿Cuál fue la razón de esa elección?
EN - Es un auténtico maestro, por muy denigrado que se encuentre entre la elite literaria. El cuento del que cogimos el nombre es una auténtica maravilla: unos niños, en el ámbito rural, que se rebelan contra los adultos y su mundo. Es una idea seductora y perturbadora a partes iguales.
¿Bajo qué influencias artísticas en general y musicales en particular tomaron la decisión de formar Los Chikos del Maíz?
El rap consciente de gente como KRS one, Public Enemy o gente como Mos def, Talib Kweli. Siempre nos gustó la gente que decía algo más allá del ego y las apariencias y clichés típicos del rap. Luego también hemos sido muy influenciados por el punk rock, desde gente como La Polla o Kortatu a grupos como Bad Religion. Se nota en la música y las producciones, también en las referencias.
En el disco más reciente –Yes Future- hay un tema titulado “Rijkaard, Gullit & Van Basten”, hace varios años tuvo mucha repercusión el EP A D10s le pido (en alusión a Maradona) ¿Son muy futboleros o simplemente les gusta tomar esas referencias? ¿Son hinchas de algún club?
Nos gusta el futbol, pero el futbol actual y las dimensiones y modelo imperante cada vez menos. Vamos al campo del Levante UE y tenemos amigos en muchas hinchadas amigas, de hecho, con nuestra editorial acabamos de publicar Gol en el descuento. Doce historias de fútbol popular, pero el futbol negocio en los parámetros actuales nos resulta abominable y una verdadera estafa.
Yendo a este último disco, pareciera que está titulado como respuesta a aquel “No Future” de los Sex Pistols en “God Save the Queen” ¿Qué perspectiva tienen respecto al futuro y cómo la expresan en el disco?
Absolutamente. Era darle la vuelta al mítico lema punk del 77 (no future) y denunciar que todo ese nihilismo surge del privilegio. La gente con el agua al cuello no puede permitirse el lujo de carecer de esperanza. En la izquierda siempre hemos dicho que si el presente es de lucha, el futuro es nuestro. No es un optimismo fanático, es simplemente reivindicar los valores utopistas de la izquierda. Si la misma izquierda plantea que no hay futuro, ¿qué carajos hacemos? ¿Que el último apague la luz? No. Claro que hay futuro si en el presente luchamos y nos organizamos. Yes future.
En el tema “New Kids on the Black Block” sentencian que “Casi todo el trap es reaccionario” ¿Qué elementos consideran que le dan ese carácter reaccionario a ese género?
El individualismo extremo. De hecho, si te fijas no hay grupos de trap, en su mayoría son solistas. Es una permanente reivindicación del Yo. Yo, siempre yo. Primero yo. Es un individualismo salvaje frente a un nosotros olvidado, frente a lo comunitario. Eso denunciamos.
En “Ecos de un futuro pasado”, tema que abre Yes Future, hacen una especie de balance de estos casi 20 años de trayectoria, incluyendo un video muy emotivo ¿Cómo resumirían esta trayectoria y cuáles sienten que son los puntos más altos de Los Chikos del Maíz hasta el momento?
Han sido 20 años que han dado para mucho. Y pese a los errores cometidos y las cagadas, podemos echar la vista atrás con cierto orgullo. Joder, después de 20 años dando la turra estamos de gira mundial por Latinoamérica, no es fácil, pero aquí estamos.
También hacen una autocrítica explícita sobre algunas expresiones de corte algo machista en letras de tiempos pasados y además hacen un importante homenaje al movimiento de mujeres tomando el himno “Pan y Rosas” para una canción titulada de igual manera ¿Cómo viven este cambio de paradigma en estas décadas?
El grupo lleva tantos años que vio nacer el 15M, las primaveras árabes y cierta ola progresista en todo el mundo. Ahora mismo en los últimos cinco años se produce a la inversa: vivimos un auge de la derecha reaccionaria. El conservadurismo está viviendo una especie de mayo del 68 facho, están en auge en todas partes. Toca remar. No tenemos miedo a las ruinas.
El problema de la censura y la persecución a artistas por sus posiciones políticas en el Estado Español fue muy agudo en algunos momentos a partir de la llamada Ley Mordaza ¿Cómo fueron lidiando con eso?
Con asco y desidia. Es terrible que después de tantos años gobernando, el gobierno español supuestamente progresista no haya retirado esa ley infame.
En una entrevista reciente planeaban algo así como que sectores la juventud actualmente consideran que “lo establecido” son algunos valores progresistas como los derechos LGBT y que, a diferencia de las juventudes de décadas pasadas que utilizaban el símbolo de la anarquía como manera de provocar, hoy utilizan símbolos nacionalistas o ideas de Vox para confrontar ¿Qué crees que se puede hacer ante eso?
Es difícil y complicado. La clave está en hacer ver que, pese a que algunos valores progresistas se hayan instaurado en el imaginario colectivo, eso no significa que hayamos vencido o llegado al final del camino.
¿Cómo ven a la izquierda de Argentina?
Como en casi todas partes se encuentra absolutamente criminalizada por los grandes medios y por ello asusta al ciudadano común. El problema de nuestro tiempo es la propiedad de los grandes medios, de alguna manera siempre lo fue, pero en los últimos tiempos y vía fake news, lawfare, etc, se ha convertido en algo capital.
¿Llegaron a tocar en territorio palestino? ¿Cómo fue esa experiencia?
Sí, estuvimos hace tres años y fue una experiencia increíble y muy enriquecedora. Es una salvajada, es un apartheid a la vista de todo el mundo y ahora mismo asistimos a un genocidio en prime time televisado para todo el planeta. Es desesperante. Duele mucho Palestina.
¿Qué expectativas tienen con esta gira latinoamericana que están realizando y que los trae por primera vez a la Argentina? ¿Cómo será el show en Buenos Aires de este 3 de diciembre?
Está siendo una verdadera locura, nunca esperamos tanto cariño. La gente nos quiere y nos lo hace saber. Hemos visitado ya México, Costa Rica y Colombia, ahora mismo estamos en Chile y terminamos el tour en la ciudad de Buenos Aires, esperamos que sea apocalíptico. Se está haciendo muy duro, son muchos días ya fuera de casa, comiendo y cenando fuera, durmiendo en hoteles, pero luego ves el cariño de la gente y sabes que merece la pena.
