En la carrera por armar su gobierno, Milei sigue mostrando sus cartas. Esta vez se trata del nombramiento de Rodolfo Barra, un político y juez de la vieja casta, que militó siempre en la derecha y contra los derechos de las mujeres.
Pero expliquemos primero para qué lo nombró y por qué. Barra será el próximo Procurador del Tesoro. O sea, será el responsable del “asesoramiento jurídico al Poder Ejecutivo Nacional” y sus organismos dependientes. Además asume la representación del Estado Nacional en juicios y dirige al Cuerpo de Abogados del Gobierno. Podemos decir que Barra será el “arquitecto jurídico” del plan motosierra de Milei.
Ese fue uno de los roles que jugó durante la década de Carlos Menem. Barra arrancó como viceministro de Obras Públicas junto a Roberto Dromi, aquel que dijo “todo lo que deba ser estatal, será privatizado” en un fallido revelador. Pero luego fue clave en el armado jurídico de toda la política menemista. Ministro de Justicia, Juez de la Corte Suprema (adicta), armador de la Constitución del 94, operador del menemismo en la justicia.
Pero Barra, además de un “cuervo neoliberal”, ha tenido otras pasiones. En su juventud tuvo un paso por el grupo ultra nacionalista y filonazi Tacuara. La noticia de que en esas épocas había arrojado alquitrán contra una sinagoga lo alejó de su cargo en 1996. Coherente con esas ideas estuvo ligado toda su vida al Opus Dei, uno de los sectores más conservadores de la Iglesia Católica.
En su paso como ministro también se lo recuerda por ser el autor de la llamada "Ley Mordaza", que intentaba limitar la actividad de los trabajadores de prensa aumentando las penas por calumnias e injurias.
Abogado del diablo
Parece lógico que Milei contrate a este personaje, cuando lo que quiere es avanzar con medidas que pueden ser cuestionadas no solo en las calles sino también "institucionalmente". Reducción de ministerios, privatización de empresas y un extenso paquete de leyes; y luego decretos. Un experto en maniobras y chicanas legales, de excelentes contactos en la corporación judicial, ¿qué más se puede pedir?
Aunque su último cargo público fue en 2002, luego siguió vendiendo sus contactos y servicios a buen postor. En 2020 volvió a la escena política como parte de los dinosaurios que hablaron en el Congreso para oponerse a la ILE (Interrupción Voluntaria del Embarazo).
En estos meses estaba preparando la “defensa” de Gildo Insfrán, el eterno gobernador formoseño, en su reclamo ante la Corte Suprema en su reclamo por la relección indefinida.
Se confirma que Milei sigue pasando con su “ambulancia” a rescatar de las catacumbas a personajes de la casta política y judicial, neoliberal, facha y antiderechos. Barra es otro de los soldados de su “plan de guerra” contra el pueblo trabajador. | 
