Jorge Macri se suma al ataque a las y los trabajadores estatales pero con un bajo perfil. A un día hábil de terminar el año comenzó con los despidos. Dentro de los cuales se encuentran tres trabajadoras del Refugio Mariquita Sánchez dependiente de la Dirección General de la Mujer. Uno de los 3 en la Ciudad de Buenos Aires a puertas cerradas para la asistencia a mujeres víctimas de violencia de género con y sin hijxs.
Las trabajadoras se desempeñan en atención de mujeres víctimas de violencia de género y prevención en violencia de género. Son monotributistas, modo de contratación precaria que abunda en la administración porteña, y con un mail les avisaron que no les van renovar el contrato el año que viene. Un despido encubierto.
Junto con el conjunto de las y los trabajadores de la Ciudad de Buenos Aires que han sido dejados en la calle exigen su inmediata reincorporación junto con la de todas las unidades convivenciales.
Con un femicidio cada 27 horas en nuestro país, según la Defensoría del Pueblo de la Nación, el Gobierno porteño a cargo de Macri, profundiza la desinversión en el área con estos despidos. Por otro lado, no hay certezas, más bien todo lo contrario, de que sean los únicos entre trabajadorxs de la Dirección. | 
