Mientras más de 22.000 palestinos han sido asesinados desde el 7 de octubre por el genocidio perpetrado por el Estado de Israel, la campaña BDS de Francia (Boicot, Desinversión y Sanciones a Israel) reveló que el grupo francés Carrefour está participando activamente en la intensificación del establecimiento de colonias israelíes en Cisjordania, contratando empleados para una de sus tiendas ubicada en Ma’ale Adumin. Según el anuncio difundido por BDS en la red social X, la empresa busca contratar personal para "puestos de servicio variados".
Ma’ale Adumin, una ciudad emblemática de la colonización israelí
Creada en 1975, Ma’ale Adumin es la tercera colonia israelí en la Cisjordania ocupada e ilustra el carácter intrínsecamente colonial del Estado israelí que, desde 1992, elevó su estatus al de ciudad, en detrimento del derecho internacional, que rechaza el establecimiento de colonias israelíes en territorio palestino.
Debido a su ubicación, el desarrollo del asentamiento de Ma’ale Adumin es un gran desafío para el gobierno israelí: situado a sólo 7 kilómetros de Jerusalén Este, su objetivo es convertirlo en una zona periférica atractiva, mediante la construcción de numerosas viviendas, centros comerciales y parques de atracciones, para mostrar un ejemplo de como avanzar en la colonización de Palestina.
Esta colonización implica una violencia sin precedentes contra la población palestina de Cisjordania, que se ha intensificado claramente desde el 7 de octubre: en 2023, la agencia de las Naciones Unidas OCHA registró nada menos que 1.225 ataques de colonos y más de 300 palestinos asesinados por los colonos o los ejército israelí . Es decir que mientras continúan los bombardeos y la ofensiva terrestre del Ejército en la Franja de Gaza, los colonos y el ejército también están llevando a cabo brutales ataques en Cisjordania.
Carrefour, un factor activo en la colonización israelí en Cisjordania
Hoy, mientras el Estado de Israel continúa su política genocida y aumenta los ataques mortíferos en muchos frentes, la empresa francesa sigue apoyando activamente la colonización en Cisjordania, como lo demuestran sus esfuerzos de contratación en las colonias.
Si, desde el inicio de los ataques de Israel contra la Franja de Gaza, el día después del 7 de octubre, la empresa Carrefour afirmó estar orgullosa de "participar en el esfuerzo nacional junto a los empleados de Carrefour y a los buenos ciudadanos que se ofrecen como voluntarios para preparar paquetes personales para los soldados de las FDI", su apoyo al Estado colonial no es nuevo. En 2022, el grupo anunció que había firmado un contrato con dos empresas israelíes: Electra Consumer Products y Yenot Bitan, que les permitió abrir franquicias de Carrefour en varios asentamientos israelíes y participar así en el desarrollo y estandarización de la existencia de estas colonias.
En Francia, el colectivo BDS denuncia periódicamente los vínculos mantenidos por el grupo Carrefour con el Estado de Israel, señalando así los intereses que las empresas y los gobiernos de los países imperialistas tienen en la política de la guerra colonial liderada por Israel. Los llamamientos a boicotear a las empresas vinculadas a Israel han cobrado fuerza desde el 7 de octubre, y algunas de ellas pueden haberse visto afectadas: es el caso, en particular, de la cadena de comida rápida McDonald’s, que intenta ocultar lo mejor posible su apoyo a Israel, o la marca Puma, que puso fin a su asociación con la selección de fútbol israelí tras una importante campaña de denuncia liderada por BDS .
Las dificultades encontradas por estas marcas demuestran la importancia del apoyo a la causa palestina a escala internacional. El boicot, una herramienta histórica de solidaridad con los pueblos oprimidos que luchan contra el colonialismo y el imperialismo, puede ser un punto de apoyo para amplificar el movimiento por Palestina. Para ampliarlo, los trabajadores de estas empresas, así como el movimiento sindical en su conjunto, tienen un papel central que desempeñar en el establecimiento de un equilibrio de poder a través de sus propios métodos, como las huelgas y bloqueos llevados a cabo en diferentes puertos del mundo para impedir el envío de armas a Israel. |