AMLO comenzó su mañanera diciendo que todos los días reciben información de seguridad en todos los estados. Así como él, nos dice, todos los gobernadores hacen lo mismo, principalmente Américo Villarreal de Tamaulipas. Había que intentar restañar las heridas del secuestro de 32 migrantes.

Así, Rosa Icela Rodríguez salió a informar de cómo los inmigrantes secuestrados finalmente aparecieron, luego de ser secuestrado en territorio del cual Américo Villarreal es responsable. Todo un relato de cómo fueron enclaustrados en una finca y desde ahí se llevó a cabo la extorsión pidiendo rescate y todo el despliegue que supuestamente se hicieron en seis municipios. El temor a las fuerzas desplegadas, dice el relato gubernamental, hizo que los criminales liberaran a las víctimas. Ergo, no hay enfrentamiento ni detenidos. Luego vino toda la numeralia de las fuerzas operativas y la promesa de que seguirán investigando.

Luego apareció en video el gobernador a poner su cuota de verdad y defendiéndose de “un medio” al cual podía acusar, dijo, de estar involucrado en el crimen. Viejos estilos de gobernar. Luego el cierre de AMLO de los buenos policías y la mala prensa para defender a su amigo, negando las calumnias de ingobernabilidad endicho estado y ofreciendo probar el buen trabajo del gobernador con gráficas, etc.. Había que darle un buen levantón mediático, un poquito de maquillaje (unos 10 minutos hablando de los delitos que "había" antes y con la 4T desaparecieron), al góber ridiculizado por el crimen organizado.

Y también un poquito de maquillaje a la tarea asignada desde Washington al acompañamiento de "nuestros hermanos venezolanos, colombianos caribeños" (...) hay que pedirle al Congreso de EE UU un presupuesto, no para la guerra sino para el desarrollo de su patio trasero, no como el gobernador de Texas sino esperando la buena nueva de míster Biden y los ciudadanos estadounidenses jóvenes tan concientes y no manipulables. Pedirle más peras al olmo y, sí, la responsabilidad de contención migratoria en el sureste vía la Guardia Nacional, también fue trastocada por el secuestro de marras.

Y aprovechando el viaje: "se esta hablando con el gobernador de Tabasco (por los múltiples robos coordinados de ayer) y se les va a ayudar con más Guardia Nacional" y más del relato oficial: vamos bien, menos homicidios, menos delincuencia, estadísticas...etc.

Lenia Batres, era otro tema importante, a propósito de la "pregunta" oportuna del día. "La ministra del pueblo" es la etiqueta con que va ser manejada por AMLO, a propósito de una pelea callejera de uno de sus hijos. Vamos de gane porque "ella no es de la élite" y más frases arropadoras a quien fue colocada en la Suprema Corte por el decisión suya, aprovechando la normativa legal. Esperar y ver. Con ella se trataría de equilibrar los manejos de los hacedores de justicia, al servicio de los poderosos, quizás no sea suficiente, en el marco de la polarización entre el gobierno y sus opositores, quienes tienen fuerte influencia en el poder judicial.