“Seguimos igual…” afirma una médico especialista en anestesiología que pasó de tener una precaria contratación en la SEDESA a un contrato formal con el IMSS-Bienestar en septiembre de 2023.

La trabajadora de la salud había tenido por varios años un contrato precario en un hospital de la Secretaría de Salud de la Ciudad de México (SEDESA), una de las tantas formas de contratación que tiene el instituto para enmascaran el “outsourcing”, que el presidente Andrés Manuel López Obrador prometió hacer desaparecer en su gobierno.

En junio del año pasado personal médico de la SEDESA salió a protestar por su incorporación al IMSS-Bienestar una acción impuesta por las autoridades Federales y Locales en complicidad con las dirigencias sindicales del SNTSA, FTSE, el SNTSS y del Sindicato Mexicano de la Salud (SIMESA).

La acción afectaba a los derechos laborales de las y los trabajadores de la SEDESA, ya que muchas veces veían reducido su salario de quienes muchas veces el gobierno federal y local llamó héroes y que estuvieron en la primera línea en la pandemia.

Al final las autoridades contrataron entre 5 mil y 6 mil trabajadores al IMSS-Bienestar, entre ellos a la anestesióloga, pero asegura que aún tiene compañeros que no fueron incorporados al nuevo esquema y que las mismas autoridades les dijeron que el proyecto está en construcción, “¿por qué apuraron el proceso?”, pregunta la anestesióloga.

La doctora asegura que actualmente faltan insumos básicos en su centro de trabajo como guantes pues no hay de las tallas requeridas y señala que el recorte de casi 2 mil millones de pesos al presupuesto de salud del jefe de gobierno sustituto Martí Batres Guadarrama, afectará en la atención sin duda.

En la administración del SEDESA los trabajadores subcontratados eran quienes realizaban el mayor número de tareas, incluso los sindicalizados tenían tres periodos de vacaciones mientras quienes tienen contratos precarizados sólo dos. Pero incluso los sindicalizados estaban divididos por la dirección quienes cobran para otorgar su número sindical, lo que los coloca en mejor posición y con mejores prestaciones.

Sobre la “mega farmacia” promovida por el presidente Andrés Manuel López Obrador que promete surtir cualquier medicamento que haga falta en el sistema IMSS-Bienestar, la anestesióloga se muestra escéptica y dice “esperemos que lleguen”, refiriéndose a las medicinas.

La maniobra de las autoridades de la contratación masiva desactivó las protestas de en el sector salud, ya que para que ellos pudieran salir a las calles a protestar se requería organización para no dejar sin atención a los pacientes. Actualmente el personal de salud se está organizando con Fuerza Independiente de Trabajadores de la Salud (FINTRAS), que surgió del movimiento por basificación, y con la Coordinación de Trabajadores de la Ciudad de México, junto a otras organizaciones, se apuestan a pelear por plenos derechos laborales y libertad sindical y de organización para las y los trabajadores de distintos sectores y a nivel nacional aunque esté integrado al IMSS Bienestar no ha sido basificado.

El viernes pasado en Ciudad Victoria, Tamaulipas el representante de trabajadores eventuales de la Secretaría de Salud, Miguel Ángel Martínez Garza acusó al IMSS-Bienestar de incumplir con el pago de las quincenas al personal que en noviembre pasado firmó para ser “contratados por la nueva institución.