El gobierno de derecha no solo intenta aprobar leyes antipopulares y decretos antiobreros. También aplica medidas directas. Por ejemplo, los aprietes a las organizaciones sociales y el ataque a los sindicatos que realizaron el paro del 24E.
La Dirección de Inspecciones Federales de Trabajo decidió sancionar a APA (Asociación del Personal Aeronáuticos) y le aplicó la multa por 160 millones de pesos. La denuncia estuvo impulsada por la gerencia de Aerolíneas Argentinas. La multa fue aplicada bajo una norma que obliga a pagarla antes de tramitar una queja.
El gremio adelantó que no la pagará y denunció que se trata de “una resolución claramente intimidatoria, antisindical, ilegal y violatoria de derechos consagrados por la Constitución Nacional y Convenios Internacionales de la OIT ratificados por nuestro país”. Además señala que “pretenden ilegalizar la medida de fuerza y sancionar a nuestro sindicato, llegando al extremo absurdo de intentar multar a la organización por ejercer sus derechos en una cifra multimillonaria, imposible de pagar”.
La táctica de las multas fue impulsada por Jorge Triaca en su gestión al frente de la Secretaría de Trabajo. Sin embargo, los ataques fueron cayendo tiempo después por el carácter claramente ilegal de las medidas. Por eso ahora imponen, desde el Estado, el pago directo.
La acción confirma que, a pesar de la estrepitosa caída de la Ley Ómnibus que busca privatizar Aerolíneas y criminalizar la protesta, así como la suspensión del ilegal DNU 70/23 que ataca el derecho de huelga, el Gobierno intentará avanzar por otros medios.
Con más razón, es necesario que desde la CGT y los sindicatos se retome el plan de lucha que se reclamó en el paro de enero. El único lenguaje que entienden los libertarianos es el de la lucha de clases. Y las fuerzas del pueblo ya le dieron una primera derrota a las “fuerzas del cielo”. |