Estudiantes terciarios de la Ciudad de Buenos Aires, vecinos que se organizan en las asambleas de sus barrios y estudiantes universitarios y trabajadores de la salud que se organizan en la Posta de Salud y Cuidados comenzaron a organizarse para el comienzo de clase, que está atravesado por el fuerte ajuste de parte del gobierno de Milei y los gobernadores provinciales. Parte de esos ataques es la baja del presupuesto, que principalmente implica un recorte en los salarios docentes, y en infraestructura, becas, y comedores escolares, sumado a un importante tarifazo en servicios y transporte.
“Es clave poder estar dando pasos en la unidad con las asambleas barriales, porque para nosotros el ataque a la educación pública no es solo a los docentes y estudiantes que estamos actualmente en los colegios, terciarios o universidades. Para nosotros la educación es un derecho de todos y todas. No queremos que estudiar sea un privilegio para unos pocos”, dijo Sebastian Zignego presidente del centro de estudiantes del Joaquín V. González e integrante de la asamblea terciaria de CABA.
Yani de la asamblea de Balvanera y estudiante de la carrera de sociología en la UBA nos cuenta: “estudio y trabajo como muchos de los que somos parte de la universidad pública y me parece muy importante impulsar el cacerolazo que estamos organizando con las asambleas, un espacio en el que confluyen muchos sectores: jubilados, estudiantes, trabajadores del sector privado, estatales, docentes, etc. Nos estamos organizando desde abajo porque realmente es brutal el ataque que estamos recibiendo, y somos los que realmente estamos dando una lucha. Mientras la CGT hizo medio paro, le sigue dando tiempo a la Milei para que nos ajuste… realmente no está tomando el lugar que se necesita para torcerle el brazo al gobierno”.
Nahuel es estudiante de Historia del profesorado Joaquín V. Gonzaléz y participante de la asamblea terciaria, nos comenta: “Me sumo porque coordinados con otros laburantes y estudiantes podemos enfrentar mejor el ataque de Milei”. “Para enfrentar los recortes del gobierno necesitamos poner en pie acciones de impacto, en la calle y de manera coordinada. No es suficiente el enfrentamiento discursivo que llevan adelante las organizaciones peronistas, por eso convocamos a todos los centros a que puedan sumarse” agregó Susana Gomez, presidenta del Alicia M. de Justo.
Desde el verano las asambleas barriales, vienen coordinando entre sí varias acciones en defensa de la educación pública, muchas han realizado festivales para juntar útiles y ser entregados en escuelas, ya que la canasta escolar con respecto al año pasado aumentó un 450%. El fuerte aumento en las tarifas de los trenes, colectivos y subtes también implica un fuerte golpe al bolsillo de las y los trabajadores, muchos de ellos jóvenes que se ven imposibilitados de sostener el costo mensual que conlleva estos aumentos, que pueden llegar a los treinta mil pesos mensuales como mínimo, llegando a tener que ajustarse en otras áreas para sostener su laburo o incluso para sostener la cursada.
La unidad que vienen mostrando estudiantes y trabajadores de la salud en la Posta de Salud y Cuidados es muy importante y muestran el rol que puede dar unir estos sectores, con cientos que están apoyando a quiénes se movilizan contra el ajuste del gobierno.
Pablo, docente e investigador del CONICET, integrante de la asamblea de Córdoba y Pueyrredón nos dijo en relación al tema: "Hay que participar del cacerolazo para hacer oír nuestra voz, y ejercer nuestro derecho a la libertad de expresión, mucho más en este momento en que se atenta contra los derechos vinculados a la educación y quieren limitar o castigar la libertad para expresarnos".
Por su parte, Bruno, estudiante de Lengua y Literatura de un profesorado de zona Houssay, remarcó la perspectiva de esta acción: "Creo que la relevancia de este cacerolazo, como forma de protesta al ajuste de Milei, reside, principalmente, en la búsqueda por fortalecer la articulación entre distintos centros de estudiantes y asambleas barriales. Imprescindible, para la gran lucha obrero-estudiantil que debe seguir avanzando".
Estos testimonios y la convocatoria dan cuenta de que la resistencia al “plan motosierra” encontrará en la unidad de estudiantes, trabajadores y asambleas vecinales, un nuevo obstáculo para seguir atentando contra los derechos básicos de la comunidad. Es importante fortalecer esta organización en apoyo también a los y las trabajadores despedidos de Télam, de la tercerizada de Aerolíneas Argentinas (GPS), de AySA, etc, y de toda la población que está siendo atacada por el ajuste del gobierno. Retoman las banderas de la coordinación entre todos los sectores, aprovechando la cercanía con el 24 de marzo y las enseñanzas de unidad de esa generación entre estudiantes y trabajadores, eso va a permitir enfrentar con más fuerza al gobierno de Milei. |