Las diversas movilizaciones no se han depuesto en la ciudad de Antofagasta, incluso se han extendido a ciudades como Mejillones y en la última asamblea del Colegio de Profesores de Chile fue votado a nivel nacional, votaron plegarse al paro nacional impulsado por docentes, apoderados y estudiantes en Antofagasta.

La situación abierta en Antofagasta, luego de la trágica muerte de Katherine Yoma, se fue transformando en una gran movilización, que ya lleva más de dos semanas, donde han paralizado prácticamente el total de los establecimientos educacionales de la ciudad, sumándose incluso algunos jardines infantiles, y con marchas que superaron las 2 mil personas.

Se han levantado asambleas masivas, con amplia participación de trabajadores de la educación, sumándose además esta semana, la movilización y paralización de docentes en Mejillones. En la última asamblea, se planteó la exigencia de renuncia al Alcalde de Antofagasta Jonathan Velasquez y la exigencias a las direcciones del Colegio de Profesores de Chile para convocar a un paro nacional. Esta última acción, fue ratificada en la asamblea nacional del CdP con más de 200 delegados que representan a docentes en todo el país.

Diversos parlamentarios han propuesto discutir procedimientos y protocolos por el caso de Katherine Yoma, pero lo han hecho buscando darle una salida que particulariza la situación de agobio y precariedad laboral del sistema educativo. En este sentido la Ley Katherine Yoma, se viene discutiendo, pero no puede transformarse en un conjunto de medidas punitivas, sino todo lo contrario, debe poner de manifiesto las condiciones precarias y que ponen en peligro día a día a miles de trabajadores de la educación en Chile. Lo que debe cambiar de fondo, son las condiciones actuales de trabajo que tenemos las y los docentes.

En ese sentido, la exigencia al Colegio de Profesores, donde los dirigentes nacionales no han estado presente ni se han comunicado, respondiendo muy tardíamente a la grave crisis de la educación en Chile, cuando durante años se ha manifestado desde cada lugar de trabajo, los abusos cometidos por autoridades, las cuales quedan en completa impunidad.

El llamado es a poder sumarse a la movilización nacional, fortalecer la organización y movilización, articulando las fuerzas de trabajadores de la educación, estudiantes y apoderados, sin los cuales es imposible dar una gran lucha. Desde esta unidad, impulsar un pliego de demandas que busque acabar con todos los peligros y agobios que tenemos que enfrentarnos día a día quienes trabajamos en la educación.