Como todos los sábado, se reunió la asamblea de Unidxs contra los Despidos, que cuenta con la participación de trabajadores despedidos y ocupados de 40 dependencias estatales. Y de la que también es parte la agrupación Jubiladxs Insurgentes y vecinos de asambleas barriales.
Ante el proyecto de Ley Bases II que se tratará este lunes, se definió convocar a las 11hs frente al Congreso. Desde éste espacio de trabajadores activos y pasivos, se exige a las centrales sindicales, tanto la CGT y las dos CTAs, que convoquen al paro y la movilización, para que el pueblo trabajador lo rechace en unidad, junto a los estudiantes, jubilados y asambleas barriles.
La asamblea se reunió en la facultad de Filosofía y Letras de la UBA. Destacó la participación de trabajadoras y trabajadores despedidos de la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS), de la Secretaría de Trabajo con Larisa Pérez que lucha por su reincorporación y la de sus compañeros, del Ministerio de Justicia, con Erilka Ledereer que acaba de ganar su reincorporación, también participaron trabajadores del INDEC, AYSA, ANMAT, Banco Nación, CONICET, Ministerio de Economía, trabajadores municipales, entre otros. Estuvo presente Luca Bonfante, miembro estudiantil del Consejo Directivo de la facultad.
- Se debatió sobre la multitudinaria movilización universitaria que se dio en todo el país y que fue un golpe político a los planes de ajuste del Gobierno. Y un despertar del movimiento estudiantil, que salió masivamente a las calles, también junto a sectores de trabajadores. Unidxs contra los despidos participó junto a los despedidos de GPS-Aerolíneas Argentinas y una gran columna de estudiantes de la Facultad de Diseño, Arquitectura y Urbanística de la UBA (FADU). La unidad entre trabajadores y estudiantes, fue algo que se destacó en distintas voces de esta asamblea, como una alianza poderosa para derrotar el plan del Gobierno y el FMI.
- La asamblea debatió centralmente sobre el proyecto de Ley Ómnibus II, y sobre cómo desarrollar fuerzas para que vuelva a fracasar en el Congreso. Se trata de un paquete que busca atacar derechos laborales de los trabajadores estatales y avanzar en privatizaciones. La defensa de los puestos de trabajo y la lucha por la reincorporación de todos los despedidos y despedidas del sector público, va de la mano con impulsar una gran movilización en las calles para que caiga nuevamente esta ley. De aprobarse permitiría, por ejemplo, despedir trabajadores con licencia por enfermedad, accidente o maternidad.
También afecta a los trabajadores monotributistas (una forma de fraude laboral muy extendida en el Estado). El Gobierno quiere meterle mano en el bolsillo a los trabajadores, mientras busca bajarle impuestos a millonarios como la familia Rocca.
Y los jubilados y jubiladas siguen en la mira: quieren eliminar la moratoria con la que hoy se jubilan 9 de cada 10 mujeres. Y aumentar la edad jubilatoria.
En suma, se trata de un nuevo paquete que solo beneficia a los grandes empresarios. Y que abre la puerta a mayores tarifazos y ajustes. Junto una reforma laboral, jubilatoria y fiscal totalmente regresiva.
La asamblea de Unidxs contra los Despidos reafirmó su voluntad de impulsar la coordinación entre todos los sectores en lucha del pueblo trabajador. Y alentar el espíritu de la organización asamblearia en cada lugar de trabajo y estudio. Como así también la necesidad de arrancar desde abajo, una huelga general y un plan de lucha unificado a todas las centrales sindicales, que permita desplegar la fuerzas de lucha en unidad de todo el pueblo, hasta que tirar abajo todo el plan de ajuste. |
