En la conferencia de prensa de este jueves 23 de mayo el presidente López Obrador se refirió a la disputa con la minera estadounidense Vulcan Materials, que opera en Quintana Roo.
El martes pasado Blinken, durante su comparecencia en el senado estadounidense, crítico al gobierno mexicano por intentar apropiarse los terrenos de la minera en Playa del Carmen y señaló que “no son buena forma de atraer inversiones”. En respuesta, López Obrador recriminó el intervencionismo del secretario de Estado del gobierno de Biden.
Señaló que “la empresa Vulcan explotaba la grava y la arena de Quintana Roo, para construir las calles y carreteras de Estados Unidos a costa de nuestro territorio, ¿quién los dejó? Carlos Salinas y Ernesto Zedillo”.
Así denunció López Obrador este caso como resultado de la entrega de recursos a trasnacionales con nefastas consecuencias para el medio ambiente y declaró que México no quiere ser colonia de China, Rusia, Francia ni Estados Unidos.
Aunque desde la administración estadounidense lo acusan de impulsar una expropiación federal, López Obrador ha negado que sea una expropiación federal, sino que es una clausura debido a que la firma incumplió con la legislación ambiental y reivindicó su postura de recuperar los predios concesionados a la minera antes de que finalice su gobierno.
Sin embargo, su acción ante el caso de Vulcan Materials contrasta con el desarrollo de los megaproyectos en el sudeste, que implican graves consecuencias para el medio ambiente y las fuentes de agua dulce en la región, en particular en la Península de Yucatán, que incluyen daños a los cenotes y a los manglares, y que conllevan riesgos para la operación del Tren Maya.
Se necesitan obras públicas, pero deben planificarse y llevarse a cabo bajo control de trabajadoras, trabajadores y pobladores, de acuerdo con las necesidades sociales, no según los intereses de las trasnacionales.
Otro tema que se abordó fue el colapso del templete en el acto de cierre de campaña de Lorenia Canavati en San Pedro Garza García, en el que participaba el candidato presidencial de Movimiento Ciudadano Jorge Alvárez Máynez. López Obrador expresó sus condolencias a los familiares de las 9 personas fallecidas y su solidaridad con los afectados. A su vez, señaló que se deben realizar investigaciones para determinar cuál fue la causa del accidente.
Otro tema al que se refirió el presidente fue la urgencia de hacer una revisión de todos los organismos internacionales vinculados a la ONU, en particular los que supuestamente abogan por los derechos humanos y el medio ambiente.
Respecto al caso con Ecuador, por la violación a la embajada mexicana en ese país y agresión contra diplomáticos, rechazó que se busque el diálogo con quien no respetó la soberanía.
La Corte Internacional de Justicia acaba de rechazar las medidas cautelares para proteger la embajada de México en Ecuador, así como muebles y equipo y bienes personales del personal diplomático que quedaron en ese país andino. Ante este revés, López Obrador planteó que todavía no termina el juicio en la Corte Internacional, y afirmó que es positivo que se tenga el precedente para que no se atropelle la soberanía de un país.
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