| Estamos en este plenario de comisiones en una situación muy particular. Ayer salió el índice del INDEC respecto de la actividad económica con un desplome en el mes de marzo de 8,4 %, 250 mil cuentas sueldo menos, un indicador del aumento de la desocupación y pérdidas de puesto de trabajo formales. El dólar, que supuestamente tenían controlado, 20% de aumento en los paralelos. Y fíjese usted que mientras ayer el presidente, en el recital que dio el grupo Milei y los cuatro del rock and roll, decía que cualquier intervencionismo en el mercado lo condenaba ideológicamente. Tiene todo el derecho de dedicarse a la música, nadie va a cuestionarlo, pero eso de llegar a presidente para que lo vayan a ver a un recital es un poco peculiar. Entonces, decía, que él sostenía una condena a cualquier tipo de intervencionismo estatal en la economía y hoy nos enteramos que Luis Caputo está interviniendo en el mercado para tratar de frenar los dólares paralelos: el blue, el contado con liqui y el MEP. Entonces es un gobierno que, efectivamente, todas las contradicciones del esquema económico que desarrolló desde el mes de diciembre están empezando a quedar claramente expuestas.
Eso es lo que estamos viendo y estamos viendo que lejos de festejar un ajuste brutal, un ajuste cruel que incluso dejó de enviarle la mercadería a los comedores populares, un ajuste que se le agarra con la discapacidad, un ajuste que se la agarra con los trabajadores quebrándoles el salario, un ajuste que se la agarra con los jubilados y las jubiladas, el pueblo está mostrando su voluntad de enfrentar esta política como lo mostramos los universitarios y universitarias marchando en 70 ciudades de todo el país, como se mostró en el paro general del 9 o ahora en Misiones. Escuchaba a una bioquímica, con 20 años de actividad, que tiene que pagar monotributo y cobrar 190 mil pesos después del aumento del último mes, o a una docente que cobra 240 mil pesos en una provincia donde la luz tiene un costo mensual de 100 mil pesos. Todas estas contradicciones insisto están aflorando, mientras el presidente tiene tiempo para tocarse algunos temas de rock and roll, mientras empezamos a bailar en la cubierta del Titanic. Una situación frágil porque efectivamente a eso nos condujo esta política de desregulación, liberalización de todo, dominio de los grandes monopolios y entregarle el control del Estado a un puñado de grupos económicos para que nos saqueen.
En este marco es que estamos haciendo el debate y la universidad no está al margen. Yo mostré la relación que hay entre inflación de noviembre del 2023 a la actualidad y salarios de la docencia universitaria. Vuelvo a mostrar el cuadro para que quede claro, inflación de noviembre 12,8 % y salario docente universitario 9 %, esto es responsabilidad del gobierno de Massa. Diciembre inflación 25,5 % -responsabilidad compartida entre los dos gobiernos- y aumento 5,5 %. Enero, responsabilidad ya pura de Milei, 20,6 % de inflación y aumento docente universitario cero (0 %). Febrero arrastrábamos un 10 de la paritaria anterior, contémosle todo, 16 % y la inflación 13,2 %. Marzo 12 % y 11 % y abril 8 % y 8,8 %. En total hubo 133,4 % de inflación desde noviembre a ahora y 61,4 % el aumento que hemos tenido en los salarios.
¿Cómo no va a haber razones para que haya hoy un paro nacional frente al deterioro brutal de estos ingresos salariales? Insisto en este dato porque en nuestro dictamen está claramente especificado que el aumento tiene que ir tanto para los recursos de funcionamiento, los recursos operativos de las universidades, como para los salarios. Y establecemos que a partir de esta recomposición luego se actualice por IPC como piso, ya que las paritarias pueden incluso conseguir algún aumento superior y entonces obviamente recomponer lo que ya venía cayendo.
Tengo dos pequeños cuadros más para mostrar lo que ha sido el deterioro de los ingresos universitarios. Si lo comparamos con el 1 de diciembre del 2015, de un índice 100 en aquel entonces ahora estaríamos en un índice 54 al mes de abril de este año. Y si lo comparamos con el 2019, estaríamos ahora en un índice de 66. Creo que es patente cómo se ha atacado el salario universitario en los distintos gobiernos y cómo ha habido un derrumbe a partir del mes de diciembre. Por eso incluimos este punto e incluimos los recursos para las obras sociales universitarias.
El tema que hay tiene su relevancia porque obviamente va a haber otros dictámenes, otros bloques van a presentar sus propias ideas de aumento. Pero acá hay que ser muy claros, con la Ley Bases se ataca también la posibilidad de estudiar. Si se atacan los derechos laborales y, obviamente con el DNU, se ataca la posibilidad de alquilar para poder estudiar, si este plan de licuación de salario se mantiene, le diría que hasta podemos con la lucha conseguir el presupuesto, pero eso no significa que las y los estudiantes puedan tener acceso a las posibilidades de estudiar. Si tu familia se queda sin empleo como está ocurriendo, si no podes pagar el alquiler, si no podes pagar los servicios, ¿cómo te van a financiar para poder estudiar? Si no tenés trabajo o si tenés que hacerlo precariamente. El otro día escuchaba a un trabajador de una de las empresas de delivery decir que su jornada laboral empezaba a las 7 de la mañana y culminaba a las 12 de la noche. ¿Qué condiciones van a tener los jóvenes para poder estudiar si tienen que trabajar todo el día para poder cobrar apenas lo necesario para pagarse un alquiler y subsistir?
Hay que tener muy claro, al menos en nuestro caso, que la pelea por el presupuesto universitario no es una pelea aislada, sino que es parte de la lucha porque los jubilados y jubiladas recompongan sus saberes, es parte de la lucha porque los trabajadores no pierdan derechos y al revés, que los que no los tienen los consigan, es parte de una lucha por torcer el rumbo de una política económica que nos está llevando a una verdadera catástrofe social. En ese sentido hacemos nuestros todos los reclamos para movilizarnos el día que se trate la Ley Bases en el Senado, si es que llega a tratarse, porque todas estas noticias y novedades que hay repercuten. Porque el crecimiento del descontento parece que hay muchos que ahora lo van a escuchar. Porque algunos senadores de algunos partidos empiezan a leer lo que dice la Ley Bases y no sé cómo le van a contestar los diputados de esos mismos partidos que la votaron a las críticas que hacen algunos de sus propias organizaciones. Hay una tendencia social claramente a la expresión de un descontento mucho más grande con la política económica que se está aplicando y que, insisto, ha beneficiado a unas pocas grandes corporaciones en detrimento del conjunto del pueblo trabajador y esto está quedando cada vez más claro.
Por ende vamos a ir con este propio dictamen, damos un enfático apoyo a la lucha de las y los docentes universitarios, los no docentes y a toda la docencia nacional que hoy está reclamando en defensa de su salario y una cosa más, para el presidente la comisión que viene insistiendo con el tema de que el deterioro es por las huelgas: si los gobiernos invirtiesen lo necesario que la educación necesita ningún docente ni ninguna docente se ve en la obligación de hacer una huelga para defender su salario. Acá hay muchas responsabilidades de haber desfinanciado la educación pública, ni siquiera han llegado al 6% de la Ley de Financiamiento Universitario más que en uno o dos años, han desfinanciado todos los niveles de la educación y ahora encima han sacado el FONID. ¡Dejen de querer culpar a la docencia que defiende con vehemencia sus condiciones de ingresos! ¿Se imaginan lo que serían los salarios docentes, que hoy son muy bajos, si no hubiese lucha, si no se pelease? Serían todavía mucho más de miseria y las condiciones de infraestructura mucho peores. Este es nuestro dictamen, aportando para que las universidades no sigan perdiendo, pero señalando también que necesitamos una lucha del conjunto del pueblo trabajador, de los estudiantes, de todos los movimientos de lucha para poder derrotar este plan de hambre y miseria que está llevando adelante el gobierno de Milei. |
