El inicio de medidas fue resuelto en plenario nacional de delegados en donde se votó dar inicio a un cronograma de interrupción intermitente de la prestación del servicio en el marco de un plan de lucha que ya había sido anteriormente anunciado.
Los trabajadores que prestan los servicios de navegación aérea realizan tareas por especialidad tal como Aro/Ais que son los responsables de gestionar los planes de vuelo y toda información que afecte la seguridad de los mismos, el personal técnico de mantenimiento del soporte tecnológico y los controladores de tránsito aéreo, todos nucleados en ATEPSA a nivel nacional. La empresa responsable es la Eana cuyo nuevo directorio acaba de asumir con un acto inaugural de más de 30 despidos de personal administrativo en distintos aeropuertos del país. El nuevo presidente de la empresa es Agustín Grellet quien cumplió ese mismo cargo durante el macrismo y cuyos antecedentes por prácticas antisindicales se mantienen en la memoria de los trabajadores.
Pero los despidos no fueron el único ataque hacia los trabajadores, sino que también se desconocieron los acuerdos previos en materia salarial que se habían conseguido y cuyo nuevo directorio desconoce. Como sucede con el resto de las empresas del estado, el nuevo directorio de la Eana tiene encomendada la tarea de aplicar un programa de ajuste y achicamiento de la estructura empresarial en donde el factor humano cumple una función no solamente esencial, sino sumamente sensible como es la seguridad de las operaciones aéreas.
Junto con la defensa del salario y contra los despidos, el sector se ha visto movilizado ante la amenaza de privatización de la línea de bandera que afecta directamente con fuentes de trabajo ya que es Aerolíneas Argentinas la única compañía aérea que conecta distintos puntos a lo largo y ancho del país y que de privatizarse, conduciría al cierre de escalas como ocurrió con la privatización de los ferrocarriles en los años 90 que condujo a la virtual desaparición de poblaciones enteras al interior del país.
Por ese motivo, los trabajadores del sector son conscientes que las provocaciones se enmarcan en un ataque de conjunto hacia los aeronáuticos que comenzó a efectivizarse con los más de 150 despidos en GPS, principal tercerizada de la línea de bandera. Los trabajadores resisten desde hace más de tres meses al grito de ¡Aerolíneas no se vende! y se han ganado el apoyo y la simpatía del conjunto de los aeronáuticos.
El inicio de las medidas que llevan adelante los controladores se da en este marco de conflictividad en el sector y están programadas a partir del domingo 9 con la implementación de interrupciones de la prestación del servicio por franjas horarias diarias, lo que afectaría el normal cumplimiento de los vuelos programados asi como la afectación del trasporte de carga en todos los aeropuertos del país. Los trabajadores reclaman el cumplimiento de acuerdos salariales ya firmados, apertura inmediata de la discusión paritaria 24/25, repudio absoluto a los despidos y cualquier intento de achicamiento o privatización, así como el rechazo al DNU 70/23 y la ley de bases que desregula la actividad pretendiendo avanzar en la "uberización" de las condiciones de trabajo. |