Durante los últimos días, los vecinos de santa Rosa volvieron a nota los efectos tóxicos y altamente contaminantes, generados por la agro-industria local y la planta de tratamiento cloaca de esta ciudad.
El arroyo Cebey, amaneció con una coloración blanca y un fuerte olor nauseabundo: que se ha vuelto característico en esta zona. El arroyo es parte de la cuenca alta de la matanza-riachuelo absolutamente contaminada. Juan vecino e integrante de la asamblea nos decía “no vamos a naturalizar levantarnos con estos olores y quedarnos callados. Nuestras vidas y sobre todo las de los chicos corren riesgo”.
Lxs vecinxs de la zona afirman que “[…] es, tristemente, normal que las empresas desechen los tóxicos que generan sus propios procesos productivo y que siempre aducen problemas técnicos, pero lo cierto es que desechan elementos tóxicos como soda cautica lo que a su vez podría explicar el color blanco y el olor putrefacto de las aguas del arroyo. Los “accidentes” o derrames son moneda corriente y principalmente ocurren los fines de semanas en horario nocturno cuando los controles son casi inexistentes”.
El nulo control municipal es una muestra de apoyo, cómplice, a las empresas contaminantes. La desidia del Gobierno municipal y Provincial, junto a las insignificantes multas de ACUMAR que las empresas contaminantes (ABSA, dos mataderos, una tripería y una seberia) pagan gustosamente: son el punto de apoyo que tienen empresas como la que se ocupa del tratamiento de aguas cloacales para darle la espalda a las denuncias y demandas de la comunidad.
Los vecinos denuncian que el régimen de multas “solo sirve para que las empresas sigan contaminando a un muy bajo costo, poniendo en riesgo la salud de todos y en especial la de nuestros chicos; además no consideran el impacto medioambiental que causa este trato de los bienes comunes naturales” decía Daniel, docente de Sta Rosa.
¡NO HAY PLANETA B!
En línea con el gobierno negacionista de Milei: en Cañuelas y Marcos Paz la impunidad y desidia con la que se manejan estas empresas, no sería posible sin la anuencia del gobierno provincial, municipal y las políticas impotentes de ACUMAR. El barrio de Sta. Un verdadero ecocidio que los vecinos autoconvocados de Sta Rosa vienen denunciando desde el 2016.
Para derrotar la impunidad y lograr el saneamiento del arroyo Cebey es necesario: visibilizar este crimen medioambiental y seguir organizándose, desde abajo en asambleas resolutivas. Para torcer el brazo de quienes priorizan las ganancias de un grupo de empresarios, al cuidado y protección de la biodiversidad y la salud de la comunidad. |