El jueves por la mañana, los trabajadores del Hôtel du Collectionneur, el hotel de cinco estrellas totalmente privatizado por el Comité Olímpico Internacional durante los Juegos Olímpicos, se declararon en huelga para exigir aumentos salariales como parte de sus Negociaciones Anuales Obligatorias (NAO).
Una treintena de huelguistas abandonaron sus puestos de trabajo entre las 7.00 y las 9.30 horas, la víspera de la ceremonia inaugural. Contactado por Révolution Permanente, Loris Toufanian, delegado de la CGT del hotel, explica: "hace siete años que no hay aumentos salariales, a pesar de que es uno de los hoteles más rentables de París. Además, el hotel aprovechó el cierre por covid para incumplir todos los acuerdos de la empresa: aguinaldo, más días libres para niños enfermos, etc. Además, un plan para despedir a 92 personas también está alimentando la ira entre los trabajadores: "Esta es la cuarta huelga de este tipo desde el inicio de la negociación colectiva (NAO) en junio".
El año pasado se pagaron 9,5 millones de euros en dividendos. El coste astronómico de la privatización (22 millones de euros) y, por tanto, los monstruosos beneficios que se avecinan, lógicamente alimentan la bronca: "Nuestras exigencias costarían al empresario un millón de euros al año, es decir, una vigésima parte del importe del contrato olímpico", explica Loris Toufanian.
La huelga también tenía como objetivo luchar contra la prohibición para que el delegado sindical pudiera entrar al hotel para hablar con los trabajadores en plena negociación del contrato. De hecho, el delegado fue privado de la acreditación del COI necesaria para acceder al hotel y ya no puede acudir a su lugar de trabajo.
Se trata de una represión sindical escandalosa, posible gracias a todos los instrumentos de seguridad desplegados durante los Juegos Olímpicos. Ante esta situación los trabajadores enviaron un ultimátum a su jefe y están esperando una respuesta para saber si extienden la huelga por completo a partir del lunes.
Esta acción tiene lugar tras las protestas de actores, músicos, bailarines y cantantes que participarán de la ceremonia inaugural, que se movilizaron por sus salarios y sus condiciones de trabajo, En este marco los trabajadores hoteleros tienen más derecho que nunca a levantar la cabeza e imponer mediante la huelga, y si es necesario durante los Juegos Olímpicos, la remuneración justa que merecen. Más aún frente a los patrones que se están aprovechando del evento y aprovechándolo para reprimir a los activistas sindicales. |
