La foto empezó a circular el martes por la tarde. Horas antes del comienzo de la audiencia en el Congreso para tratar que actitud tomará la Cámara de Diputados frente a estos hechos. Existen varios proyectos de resolución, de repudio y de expulsión.
La fotografía de la visita corresponde al 11 de julio de 2024 en la Unidad Penal de Ezeiza que desde este año está bajo control del Ministerio de Seguridad de Bullrich.
Veamos qué tipo de imagen tenemos enfrente:
¿Quién está detrás de la cámara? ¿Algún genocida que prefirió mantenerse en el anonimato? Difícilmente. ¿Un guardia del servicio penitenciario amigo o algún asistente de los diputados? Es posible.
Lo que está claro es que debe haber elevado el celular para que todos los participantes salgan, sobre todo los del fondo. Las cabezas se ordenan en función de la cámara, asomando para aparecer. Tal vez por eso vemos tanto el techo y las puntas de los pies cortadas por el encuadre. Todos posan esperando ser fotografiados y sus posiciones en principio no nos dice nada. Solo la información de quienes son y qué están haciendo explica la foto.
Al frente hay mayoría de diputados y detrás genocidas. Astiz apenas se ve. Los supuestos “representantes del pueblo” aparecen acompañados de un grupo de “señores”. ¿Quiénes son?, ¿Cómo identificarlos?
Vemos caras serias, sonrisas tenues y otras más marcadas. La cruz y los estantes con simbología religiosa decoran un lugar que con las ventanas grandes y enrejadas no termina de dar la sensación necesariamente de encierro de una cárcel. Hay un intento de mostrarlos en un ambiente donde no parezcan condenados.
La cruz y la virgen inmediatamente por encima de todo el grupo puede verse como un recuerdo de la alianza estratégica de la Iglesia con las fuerzas armadas y la derecha peronista y anti-peronista. Aunque hoy voceros del Vaticano con discursos pseudo-progresistas. Quizá lo único que sí da sensación de encierro sea la cámara enrejada. Pero también puede verse desde “su” óptica como los que son acompañados por las “fuerzas del cielo” una definición que busca instalar el liberfacho Milei.
¿Por qué se fotografiaron? Los diputados y los genocidas querían un pequeño recuerdo de su velada sin duda. Hay cierto orgullo en las poses firmes y sonrisas. Quien va a cometer un crimen o un mal no suele fotografiarlo a razón de no incriminarse, pero acá vemos lo opuesto. Una foto preparada, debidamente organizada para que todos estos seres sean capturados y puedan ser vistos. Una foto que documenta fríamente una reunión que no suele verse. Acaso ¿Villarruel mostrará ahora sus fotos con sus amigos genocidas?. Se fotografían con ellos porque los quieren “rescatar” de lo que realmente son: presos por cometer crímenes de lesa humanidad contra una generación que se levantó luchando por un nuevo orden social.
Dos personas solamente tienen en sus manos papeles. Luego sabremos que son Beltrán Benedit (con un sobre papel madera) y Guillermo Montenegro (con un papel), cercano a Villarruel fueron los encargados de organizar la reunión. Ambos diputados nacional por La Libertad Avanza, ligados históricamente a los intereses de los genocidas. Hoy se habla de que los genocidas entregaron a este grupo de diputados proyectos de Ley que los benefician. Seguro que en el sobre está la prueba.
John Berger fue un genial escritor, pensador de arte - decir crítico de arte suena a que era un pedante opinólogo - y pintor que murió en 2017. De su pluma logró hacer aportes al pensamiento artístico muy importante y desde una óptica original también escribió mucho sobre fotografía. Berger de abierta simpatía por las ideas marxistas escribió lo siguiente:
“La fotografía ofrece una evidencia irrefutable (...). Sin embargo, no nos dice nada sobre el significado de su existencia”. 2 Veamos la fotografía del escándalo nuevamente. Un grupo de unas veinte personas posando frente a una cámara de brazos cruzados, con rostros adustos y otros apenas sonrientes, parece que acaban de compartir un intercambio, una reunión. El tono de la fotografía lo rompe tal vez el hombre de barba de brazos cruzados. ¿Está enojado? no lo sabemos pero resalta sobre el resto.
¿Qué sería de esta imagen sin la incansable pelea por la memoria, por la verdad y por lograr justicia de los crímenes genocidas perpetrados durante la última dictadura militar?
Nosotros le damos significado a la fotografía y es recién en ese momento que le damos un pasado y futuro. Un valor. Esta fotografía dice realmente muy poco. No es en sí mismo información lo que brinda esta fotografía, es lo que sabemos de esta imagen y quienes son estas personas y dónde están, lo que hace que sea tan escandalosa. Y es tan escandalosa, porque es un extracto de un hecho que en general no se suele ver, que busca reafirmar una política negacionista de intentar poner fin a un estado de cosas que dice que con los genocidas “ni un tantito así”. Nada. Nada de perdón. Vemos gente de muchos años, y es justamente ese un argumento que busca el gobierno y todo el arco negacionista utilizar para buscar la libertad de estos criminales.
La fotografía no nos habla de sus crímenes, nos habla de cómo se ven hoy, muchos años posteriores a los crímenes que cometieron. Pero Bullrich y el gobierno saben perfectamente que los genocidas presos y los que aún quedan por encarcelar, siguen cometiendo sus crímenes porque niegan informar dónde están los desaparecidos, quiénes son y dónde se encuentran los cientos de bebés apropiados, entre muchos otros crímenes de lesa humanidad.
Dice Berger, “la fotografía, irrefutable en cuanto que evidencia, pero débil en significado, cobra significación mediante las palabras. Y las palabras, que por sí mismas quedan en el plano de la generalización, recuperan una autenticidad específica gracias a la irrefutabilidad de la fotografía. En ese momento, unidas las dos, se vuelven muy poderosas; una pregunta abierta parece haber sido plenamente contestada”.
La escandalosa foto de los genocidas con diputados nacionales del partido de Milei y Villaruel es una evidencia que cobra significación mediante las palabras y los hechos, y las palabras y los hechos son estas: esa gente es genocida que comete crímenes y sigue cometiendo sus crímenes en tanto siguen ocultando el paradero de sus víctimas y la identidad de cientos. Que su apariencia física sea la que es - es decir la que la imagen nos devuelve - no debemos entenderla de otra forma que como el signo del paso del tiempo en el cuerpo de personas que cumplen condenas por sus crímenes.
Cabe hablar de sus crímenes. Y entonces decir que la razón de fondo de la visita de los diputados de La Libertad Avanza está íntimamente vinculada con los planes económicos y políticos que el gobierno de Mileii y el FMI con la ayuda de un sector de la oposición y la complicidad de la CGT y la inacción de quienes se dicen realmente opositores, busca restaurar en la sociedad a los militares ante la sociedad y devolver al Estado su fuerza de represión completa para cuando la necesite. El gobierno - pero vale para todos - tiene muy claro que la fuerza de la clase obrera es infinitamente superior en número y posibilidad, que debe mantener a raya cualquier tipo de radicalización porque corre riesgo de caer por la movilización popular y porque no, abrir una situación realmente revolucionaria como abrió el Cordobazo en el ‘69. Sus miedos ante las posibles respuestas en la calle a sus planes son el motivo principal de la búsqueda de restaurar a las fuerzas represivas genocidas.
“En sí misma, la fotografía no puede mentir, pero por la misma razón, no puede decir la verdad; o mejor dicho, la verdad que puede defender por sí misma es limitada”. Todo lo limitado que tiene una fotografía lo podemos resolver - por decirlo de una manera actual - con nuestra memoría, pero esta no es dada en sí, es el producto de una dura pelea en todos los ámbitos, la calle, la cultura y la justicia. Toda la verdad que dice una fotografía nos permite probar todo lo que decimos y tal vez sea necesario acompañar esta fotografía de muchas otras, que sí dan cuenta de todo lo que esta foto no puede.
H.I.J.O.S regional Capital
Notas
1 https://forourcolleagues.medium.com/statement-81135f253770
https://www.instagram.com/forourcolleagues?igsh=MXRmMGM5OTc3ZDl3ag==
2 John Berger, ‘Apariencias’, en Para entender la fotografía, 2013 |