Este miércoles por la noche, Francisco Paoltroni dejó de pertenecer al reducido bloque que La Libertad Avanza tiene en el Senado de la nación. Mediante un texto enviado a la presidenta de la Cámara, la también oficialista Victoria Villarruel, ese espacio indicó que echaba al senador formoseño.
La decisión se basa en la oposición de Paoltroni a la promoción de Ariel Lijo, cuestionado juez federal, como candidato para integrar la Corte Suprema de la nación. Esa propuesta es impulsada por el mismo Milei y -según confirmó el senador Mariano Recalde- viene siendo negociada con el kirchnerismo.
Paoltroni, además, había desafiado políticamente a Milei hace pocos días, al declarar que no lo consideraba su jefe sino un “socio político”. Esa afrenta al verticalismo no cayó bien en una fuerza que presenta a su titular casi de manera mística.
Sin embargo, la vicepresidenta decidió rechazar el pedido de los senadores por "improcedente". El argumento utilizado es técnico. Técnicamente, no es algo que le corresponda a la Presidenta del cuerpo. Los bloques tienen autonomía, por lo tanto pueden decidir ellos mismos su conformación y cambios. La decisión de Villarruel es un gesto político, que agudiza la interna.
La crisis del oficialismo no para de crecer. Este martes se conoció la renuncia y expulsión de Lourdes Arrieta, la diputada que, luego de haber visitado genocidas en el penal de Ezeiza, intentó desligarse acusando penal y públicamente a sus propios compañeros y compañeras de bloque.
No es la única crisis dentro de la alianza oficial. De hecho, hay una fuerte interna entre el presidente y al vice que tiene muchas expresiones de manera regular. Además de diferencias internas, esa crisis evidencia los límites de un gobierno que empieza a sufrir el desgaste de su desastrosa gestión económica, que empujó a millones a una pobreza aun más aguda.
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