Por tercer año consecutivo, la patronal inmobiliaria se reúne en Barcelona para celebrar ‘The District’, la feria internacional de la especulación inmobiliaria. Fondos buitres, promotores y grandes empresas del sector, se reúnen para seguir especulando con un derecho para todos como es la vivienda.
La protesta organizada organizada por las plataformas de vivienda, sindicados de inquilinas y la plataforma “Enfonsem The District” contra la feria de los fondos buitres y grandes tenedores ha sido reprimida por los Mossos d’Esquadra, que han cargado contra decenas de personas e integrantes de plataformas por el derecho a la vivienda y organizaciones juveniles que se habían concentrado desde primera hora de la mañana en la apertura del congreso que dura hasta el jueves.
Pero ¿a quién sirven los Mossos d’Esquadra del PSC de Salvador Illa (y sí, también de ERC en los últimos dos años)? Como no podía ser de otra forma, la policía autonómica de Catalunya protegía el acceso a algunos de los principales especuladores inmobiliarios, todos ellos con mil y un lazos no solo con el Estado español, sino también a nivel autonómico y sobre todo municipal.
¿Y quiénes son estos fondos buitres y grandes tenedores? Los mismos que se enriquecen a expensas de generar que miles de jóvenes, trabajadores y migrantes no tengan posibilidad de alquilar un piso o que, en los casos más dramáticos, se desahucien familias enteras. Vemos algunos ejemplos:
Las entidades bancarias
En la actualidad el BBVA se sitúa líder en el ranking con más de 5.900 viviendas vacías. En el mercado inmobiliario lo siguen entidades bancarias como el Santander, que a la vez destaca por su actividad en el mercado armamentístico o CaixaBank, con miles de pisos de HPO y el Banco Sabadell.
Los fondos buitres
Hablamos de conglomerados especuladores como Blackstone con más de 5.500 pisos vacíos y la mayoría en Barcelona. Y también Divarian-Cerverus, el mayor fondo buitre de Cataluña. Ambos mantienen paquetes inmobiliarios provenientes de los activos habitacionales de bancos y muchas de las cajas rescatadas con dinero público después de la crisis de 2008.
Y no olvidemos la connivencia de los partidos de la derecha catalana como Junts, que votan junto con la derecha y extrema derecha española mantener los privilegios de la patronal inmobiliaria con la que los unen estrechos vínculos, como vimos recientemente en la votación por la proposición de ley para regular los alquileres de temporada y de habitaciones.
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