Más de cien personas asistieron este domingo a la jornada artística cultural "Octubre sigue vivo" organizado por Casa Marx para conmemorar los 5 años de la rebelión popular desde una instancia de encuentro, reflexión y recreación para todas las edades.
La actividad comenzó con el lanzamiento del libro "Así mataron en octubre" de Dauno Tótoro, dando a conocer las vivencias de tres mujeres familiares de jóvenes asesinados en manos de militares durante el período de revuelta de octubre del 2019. En este libro se relata lo ocurrido desde la óptica de la expareja de Álex Núñez y las madres de Romario Veloz y Yoshua Osorio desde las vivencias de esas horas y minutos cruciales, así como sus vidas, luchas y reflexiones posteriores.
En simultáneo, dentro de la casa Marx se encontraba una muestra de fotografías de las manifestaciones de octubre junto con la muestra del Documental "Gatillo fácil", dirigido por Simón Bousquet, y puestos de venta de Editorial Ideas Socialistas, Ediciones LOM, Tarea Urgente y Kiltro Ácido.
La jornada contó con un acto central en el que participaron artistas como Zonyko, FloresAlegría, Santiago poetry slam y Violentistas de siempre; junto a las palabras de Bárbara Brito, dirigenta nacional del Partido de Trabajadores Revolucionarios (PTR); familiares de las víctimas de la ley Naín Retamal y de Paola Palomera, madre de Nicolás Piña, preso político de la revuelta y también de dos integrantes de la Coordinadora por Palestina.
Bárbara Brito: "El poder está en las calles, en la fuerza organizada de la clase trabajadora y en la unidad con los sectores populares"
Bárbara Brito, dirigenta nacional del PTR, docente e integrante de la Escuelita Dignidad del campamento Dignidad de la comuna de La Florida, inició su discurso saludando a a enorme fuerza del movimiento estudiantil y docente en Argentina, que enfrenta a un gobierno que busca imponer un sistema educativo de mercado, barriendo con la educación pública. En sus palabras, Bárbara detalló el fracaso del capitalismo neoliberal chileno que se demostró hace cinco años: "Ese día comenzó la manifestación de una rabia alimentada por un modelo que ha concentrado la riqueza en manos de unos pocos y que ha empobrecido sistemáticamente a la clase trabajadora, los estudiantes y los sectores populares. Se impugnó ese Chile de las AFP, de las ISAPRES, de la sobreexplotación del medio ambiente y los recursos naturales, de la sequía para pueblos enteros mientras empresas como Aguas Andinas aumentó en un 56% las utilidades el último año. Fue la rebelión de los sin voz, de quienes se cansaron de vivir en la precariedad mientras un puñado de empresarios y políticos del régimen continúan enriqueciéndose a costa de nuestras vidas."
Bárbara al discurso de los medios masivos de comunicación frente al balance de la rebelión, en el cual están en una campaña desatada tratando de desprestigiar la rebelión: "Hoy, esos mismos que gobernaron por más de 30 años intentan deslegitimar la revuelta. Cubillos, la misma que gana 17 millones de pesos en nombre de la “libertad de enseñanza”, habla de “estallido delincuencial”. Los jalaff y los hermosilla, nos tratan de rotos de mierda a quienes nos manifestamos, el conjunto de los empresarios y sus partidos nos bombardean con encuestas manipuladas para hacer creer que Chile está peor por responsabilidad de la rebelión, pero los que manejan el país siguen siendo ellos, más allá de que haya cambiado el gobierno de turno."
"La clase trabajadora, con su fuerza, detuvo el país el 12 de noviembre del 2019, para nosotros ese era el momento de pelear decididamente por una Asamblea Constituyente Libre y Soberana impuesta por la fuerza de la movilización, levantando una Huelga General efectiva para sacar a Piñera. Y avanzar decididamente en la organización, fortaleciendo las asambleas territoriales, levantando coordinaciones entre trabajadores y otros sectores como el comité de emergencia y resguardo que levantamos en Antofagasta. Cuando los empresarios, el gobierno y los políticos del régimen temblaron con la fuerza potencial de la clase trabajadora, amenazaron con un salto en las medidas represivas, la CUT, dirigida por el Partido Comunista, retrocedió sin organizar a los trabajadores desde la base, y en un pacto transversal desde el Frente Amplio a la derecha, fraguaron el desvío constituyente, el llamado Acuerdo por la Paz. Terminaron ofreciendo una farsa constitucional, y hoy estamos viendo las consecuencias.", argumentó Bárbara frente al rol de los partidos que dirigen los organismos de las y los trabajadores y que hoy se encuentran en el gobierno de turno.
"A cinco años, debemos hacer un balance crítico, porque si bien no hemos conquistado todo lo que demandamos, hemos aprendido una lección clave: el poder está en las calles, en la fuerza organizada de la clase trabajadora y en la unidad con los sectores populares. Nos enfrentamos a una clase empresarial que no dudará en utilizar todas sus herramientas para mantener sus privilegios. Pero también sabemos que tenemos la fuerza. Las y los estudiantes siguen movilizándose, tanto en Chile como en toda Argentina. Los movimientos sociales como el de vivienda en campamentos como Dignidad siguen luchando contra la precariedad y el desalojo. Y la clase trabajadora sigue resistiendo. Hay que seguir reivindicando la movilización y la organización desde la base, construyendo una fuerza social que, unida, puede transformar este sistema desde sus cimientos"
"Nosotros no somos una organización política como las demás, queremos construir una fuerza militante de profesores y trabajadores de la educación, que haga política en industria, en los puertos, en el movimiento estudiantil, que reúna a trabajadores, intelectuales y estudiantes en un solo grupo. Porque el problema de la revuelta es que expresa la enorme fuerza y potencia de la lucha de clases, pero finalmente le entregó a “otros” la salida política, a los del Acuerdo por la Paz, a un proceso constitucional hecho a la medida de los mismos de siempre, a Boric, que viene aplicando todas las políticas represivas que el gobierno de Piñera no pudo. Peleamos por construir una organización que dispute las calles, que se organice en nuestros lugares de trabajo y de estudio, pero también disputamos en las elecciones, como lo estamos haciendo en Antofagasta, y buscando la legalización de nuestra organización en Santiago y Valparaíso hacia las próximas elecciones parlamentarias, lo hacemos sabiendo que disputaremos en la institucionalidad que ellos controlan. Lo hacemos porque queremos llevar una voz de lucha, clara y firme, independiente a los políticos empresariales, para arrancar cada demanda que vaya en beneficio de las grandes mayorías a la vez que para denunciar este sistema irracional donde unos pocos se abanican a costa del trabajo de las grandes mayorías. Invitamos a todos a ayudarnos en esta labor de la legalización, para que una voz totalmente independiente de los partidos empresariales y sus intereses pueda llevar la voz de la izquierda y de los trabajadores a todos los espacios." |
