Este martes por la mañana, Myriam Bregman cruzó en redes a la vicepresidenta de la nación. En sus redes sociales escribió: “Si a Victoria Villaruel le interesaran los niños -y no meramente figurar en una polémica-, le preguntaría a sus amigos dónde están los que fueron apropiados en la dictadura. PD: hoy cumplía años Chicha Mariani, seguimos buscando a Clara Anahí”.
La derechista vicepresidenta viene siendo parte activa de una campaña reaccionaria donde, fingiendo defender a la niñez, condena y ataca a determinados libros de literatura y a ciertas autoras.
En particular, Villarruel viene atacando distintos libros de literatura escritos por autoras como Dolores Reyes y Gabriela Cabezón Cámara. El ataque tiene como objetivo instalar un discurso reaccionario, con valores conservadores.
Villarruel es una conocida defensora de los genocidas que actuaron durante la última dictadura. De hecho, su nombre aparece en los cuadernos que tenía el represor Miguel Etchecoltaz en prisión.
Fue durante el llamado Proceso de Reorganización Nacional cuando se llevó a cabo el secuestro y apropiación de alrededor de 500 niños y niñas. Ese número incluye a quienes nacieron en cautiverio porque sus madres habían sido secuestradas y eran torturadas.
Hasta el día de hoy, los genocidas amigos de Villarruel se niegan a informar sobre la situación de esos cientos de niños y niñas, que hoy son adultos y adultas. Ha sido la lucha de los organismos de derechos humanos, encabezada por Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, la que logró la restitución de más de 130 identidades en estos años.
La campaña de la vicepresidenta y el oficialismo sobre “la niñez” es pura hipocresía y cinismo. | 
