Hace una semana, una transmisión por redes de una entrevista en la sede de la COR de El Alto, sostenida por supervisores y auto declarados dirigentes del Sindicato de Trabajadores de Aseo de El Alto, se refirió a mi persona en términos calumniosos y agresivos, mostrando una foto en la que se podía leer la pregunta “¿Cuál es tu interés en Trebol El Alto?”.
Quiénes sostuvieron esta entrevista, hoy actúan de amarrahuatos de la empresa Trebol, colaborando y sosteniendo abiertamente las escandalosas violaciones a los derechos laborales. Buscan impedir que el nuevo sindicato, a la cabeza de Tatiana Mamani y de valientes compañeras, sea reconocido legalmente y pueda imponer a la patronal el cumplimiento de todas las demandas y exigencias de las y los trabajadores. La empresa realiza estas violaciones con la colaboración de los dirigentes sindicales y del ministerio de Trabajo que solo emite resoluciones de rechazo ante las denuncias de los trabajadores y trabajadoras, lo que empujó a las trabajadoras de base a buscar apoyo en diversas instituciones, entre ellas, la Defensoría del Pueblo, Mujeres Creando, colectivos feministas, RENNO de Noticias Obreras, la Central Obrera Departamental, la COB, y un sinnúmero de puertas, hasta que llegaron a la Casa Socialista Domitila Barrios, de la cual formo parte.
¿Qué es y al servicio de que esta la Casa Socialista “Domitila Barrios”?
Inaugurada hace un poco más de un año, la Casa Socialista tiene el antecedente de la Casa Obrera y Juvenil de El Alto que entre los años 2005 y 2010 formó parte y contribuyó a la formación de más de una decena de sindicatos, además de diversos procesos de lucha obrera como los que se dieron en los años 2006 y 2007 en Aseo Urbano. En este espacio, impulsado por lxs militantes de la LOR-CI e independientes, animados por la necesidad de organizar a las y los trabajadores, se han realizado decenas de charlas y cursos de formación política y sindical. En el caso concreto de las trabajadoras de Aseo Urbano al constatar la enorme violación de derechos y el conjunto de prácticas abusivas orientadas a aumentar las ganancias de la empresa a costa de los salarios y derechos laborales, impulsamos un sinnúmero de charlas sobre derechos laborales, procedimientos laborales y judiciales, así como la importancia de la unidad de las y los trabajadores con otros sectores en lucha con la finalidad de fortalecer las luchas parciales pero también para aprender y extraer lecciones sobre los diversos conflictos obreros, buscando encontrar una estrategia que permita que los mismos puedan vencer la resistencia de la patronal, de la burocracia sindical y del ministerio de Trabajo.
Es indudable que el conocimiento, la formación y el intercambio de experiencias de lucha obrera, han permitido un aumento en la voluntad de lucha de las compañeras y por lo tanto se ha reflejado en un aumento sustancial de las denuncias de abusos patronales y en consecuencia también se ha expresado en un aumento en la organización sindical que se ha traducido en la realización de asambleas con cientos de trabajadorxs que culminaron en la elección de una nueva directiva sindical, que corruptos dirigentes de la COR y afines a la empresa intentan obstaculizar.
Este avance de la organización y lucha de las y los trabajadores de base es lo que aterroriza a una patronal que acaba de conseguir la prolongación del contrato de recojo de basura con el GAMEA (Gobierno Autónomo Municipal de El Alto) por 10 años más y desea seguir lucrando con los derechos de las trabajadoras y de los vecinos de la ciudad.
A diferencia de los empresarios y en particular de la patronal de Trebol que realizan sus actividades sobre la base de la compra de dirigentes, que consideran una “inversión”, las actividades de solidaridad obrera, como festivales, talleres, kermeses –como la de Senkata en solidaridad con las víctimas del golpe de Estado a inicio del 2020- se realizan sobre la base de la voluntad y la conciencia de todos los y las participantes. Por eso no pueden comprender cómo lo que en un inicio era un grupo de valientes barrenderas, hoy se han transformado en dirigentes de su sindicato, de casi 1200 trabajadoras (600 en “negro” gracias a la complicidad del Estado Plurinacional) y empiezan a convertirse en un punto de referencia de todxs lxs trabajadorxs interesados en resistir la ofensiva patronal y derechista.
En la casa socialista no se reparten prebendas, se intercambian experiencias, ideas y voluntades de lucha por una sociedad igualitaria, socialista. Nuestro interés en Trebol, como en todas las empresas en las que hemos enfrentado el abuso patronal, es que las y los trabajadores logren vencer en su lucha contra la patronal y por sus derechos. Estamos seguros que en ese camino llegaremos al convencimiento común que la pelea sectorial y corporativa no es suficiente, sino que es necesario avanzar en la unidad en la lucha de toda la clase trabajadora, precarizados, contratados, a domicilio, informales, etc., para poner fin definitivamente al abuso del empresariado, donde Trebol es solo una de las expresiones más desvergonzadas. Nuestro interés en Trebol, como en todas las esferas de la vida social, es la lucha contra este sistema de explotación, miseria, racismo y misoginia, con el horizonte socialista por delante.
Finalmente, nuestro interés en la lucha de las trabajadoras de Trebol está en que podemos aprender de ellas y de toda su experiencia en ir construyendo, desde la simple resistencia verbal hasta organizar un sindicato alcanzando visibilidad mediática y relevancia social. Queremos aprender de su solidaridad en los momentos en que la empresa, por medio de los alcahuetes de la conferencia de prensa, despedían, negaban derechos de vacaciones por años, exigían pagos por un permiso, pagos para entrar a trabajar en condiciones de informalidad y precariedad laboral. Queremos aprender de su constancia, y pese a las condiciones difíciles, no solo en su trabajo sino más en general en la totalidad de su vida, atraviesan situaciones de exclusión y discriminación racial y social. Una constancia que les permitió ir construyendo esa voluntad que hoy preocupa a la empresa.
Nuestro interés en la lucha de aseo urbano, finalmente, es porque la situación que atraviesan las compañeras es un calco de la situación de cientos de miles, sino millones de trabajadoras y trabajadores en el país, y que, si su experiencia se difunde, serán muchas más las voces que se empiecen a alzar contra la explotación patronal. El día que eso suceda, las violaciones al derecho laboral serán consideradas violaciones al derecho penal, y tratadas en consecuencia. Los patrones como los de Trebol, sentirán el yugo de la voluntad obrera y sobre esa base se podrá empezar a construir una sociedad de iguales, una sociedad donde la exclusión social y la opresión sobre la base del racismo, el machismo u otra forma de opresión no tengan lugar, una sociedad en la que el objetivo sea la reducción del tiempo de trabajo necesario para vivir y poder dedicar el resto del tiempo a la cultura, al arte, al estudio, al deporte o a lo que las y los trabajadores decidan.