La economía de fondo
Para la elaboración del índice se usaron mediciones en comercio, migración y seguridad, ante la expectativa de que esos tres ámbitos pueden sufrir significativos cambios bajo Trump. México y los países de Centroamérica quedan en primer lugar expuestos, con Alemania, China, Japón y Vietnam entre los 10 posibles países con mayor afectación.
Así, según Economist Intelligent, estos serían los países que podrían resultar más afectados ante cambios en la política de Trump:
Cuadro con base en datos de EIU
Más allá de las abstracciones con que EIU presenta las categorías y sus elementos, llama la atención que los estados involucrados en guerras no estén en el cuadro, como Rusia, Israel y su genocidio al pueblo palestino, Ucrania y menos aún países que han experimentado significativos procesos de luchas de clases en los últimos años, como Kenia.
Sin embargo, la mera agrupación de países tan dispares como Honduras y Costa Rica con Alemania y China, es posible por la manera en que se han vinculado esas sociedades al hegemón estadounidense durante el neoliberalismo y, en este último momento del neoliberalismo a manos de Trump, quedan expuestas a los cambios de política estadounidense.
El proteccionismo que Trump representa está muy lejos del cenit del poderío estadounidense, cuando Estados Unidos no perseguía únicamente sus propios intereses a expensas de todos sus rivales, sino que aseguraba las condiciones generales para la expansión del capitalismo como sistema, algo en lo que estaban interesados tanto los capitalistas estadounidenses como sus competidores.
Un ejemplo de esto es la amenaza de poner 25% de aranceles a productos de Canadá y México, y un 10 % más de aranceles a los productos provenientes de China. Trump ha usado como excusa una política contra las drogas para amenazar a estos tres países, los principales socios económicos de Estados Unidos según la publicación de EIU.
Los dos primeros comparten con este imperialismo una de las mayores cadenas de valor del mundo. De acuerdo con The New York Times, la imposición de estos aranceles acarrearán serias consecuencias para las industrias estadounidenses, como la automotriz, la agrícola y las envasadoras de alimentos. "México, China y Canadá juntos representan más de un tercio de los bienes y servicios que importa y exporta Estados Unidos, y sustentan decenas de millones de empleos estadounidenses". Si se concretan los aranceles prometidos por Trump, el precio de los productos importados en Estados Unidos subirá, lo cual generará un incremento de precios en diversos países, como consecuencia de la interdependencia de cadenas internacionales de valor.
Como han señalado últimamante las y los compañeros de Revolutión Permanente desde Francia: "Europa y especialmente Alemania, se está despertando a una realidad en la que los aranceles comerciales estadounidenses, junto con eventualmente una política diseñada para hacer bajar el valor del dólar, erosionarán aún más la posición competitiva de sus empresas manufactureras. Esto puede llevar al borde del abismo a parte del sector manufacturero alemán. La UE está mal preparada para este enfrentamiento. La misma se ha vuelto “adicta” a la demanda estadounidense. Estados Unidos es, con diferencia, el mayor socio exportador de la UE. Contra la visión de que la UE depende de Estados Unidos para la seguridad, pero de China para el comercio, la realidad es que la dependencia de EEUU se ha acrecentado en los dos terrenos. En 2023, la UE exportó algo más de 500.000 millones de euros a Estados Unidos, según datos de Eurostat. El valor total del superávit comercial de la UE con EEUU también ha crecido. El año pasado, la UE registró un superávit de 158.000 millones de euros en el comercio de bienes con USA. Esta cifra contrasta con el superávit comercial global de la UE, ligeramente inferior a 38.000 millones de euros ese mismo año. Las exportaciones a EE.UU. han sido especialmente importantes para compensar la balanza comercial negativa con China, que se ha deteriorado aún más desde la pandemia. Todo esto deja vulnerable a la UE ante alguien como Trump. No solo en la industria automotriz (Trump ha estado obsesionado con la industria automovilística alemana desde su primera presidencia), sino incluso la industria farmacéutica, uno de los nuevos sectores en los que las empresas europeas se desenvuelven relativamente bien, depende de la demanda estadounidense".
Si por la víspera se saca el día, Trump no modificó sustancialmente el CAFTA en su primer mandato, como sí lo hizo con el NAFTA, más bien los países centroamericanos y República Dominicana fueron, por decirlo así, librados a su suerte, es decir, en manos de China, que ha avanzado en pasos agigantados en la región, así como en toda América Latina. Si esta fuese la tónica, entonces es probable que la región vaya hacia formas políticas cada vez más autoritarias y/o dictatoriales
Seguridad y militarización
Para EIU la seguridad se reduce a diferentes formas de afrontar tareas de índole militar. En este marco, en orden, Costa Rica, Panamá y Alemania son las que podrían estar más expuestas a cambios en la política militar de Trump, que podría incluso estar preparando un gran ataque contra la burocracia del estado profundo, misma que fue una poderosa enemiga en su primer gobierno.
La presencia con tropas de Estados Unidos en Alemania hace que el grado de exposición a Trump adquiera valor máximo posible, acompañado en buena medida del gasto militar y del gasto en armas estadounidenses.
En el caso de Costa Rica, Panamá y también Guatemala (que aparece en el noveno puesto en la categorías de seguridad) el gasto militar, el gasto en armas estadounidenses y su alianza militar permanente, reflejan la extrema dependencia económico de los países de Centroamérica frente a Estados Unidos, al punto que Costa Rica y Panamá son grandes “beneficiarios” de la ayuda militar estadounidense.
Si Estados Unidos se viera imbricado de manera directa en un conflicto militar, entonces la situación geopolítica de Centroamérica podría cambiar de manera significativa. Una de las conclusiones que presenta EIU es que los países aliados a Estados Unidos con baja inversión en material militar son los más expuestos a los cambios en la política militar de Trump.
Aunque la dominación militar estadounidense haya sido continua durante el siglo XX sobre Centroamérica, eso no debe interpretarse de ninguna manera como la no existencia de importantes conflictos político, sociales y militares que han cuestionado dicha dominación, y por ello podría volver a cuestionarse en un futuro relativamente cercano.
Migración: el producto de la política de Estados Unidos hacia Centroamérica
En general, seis de los 10 países con mayor probabilidad de afectación en materia de migración son de la región, y específicamente estarían en los cinco primeros lugares en este orden: El Salvador, República Dominicana, Honduras, Guatemala, México y Nicaragua en el puesto 9.
Ahora bien, esta lista de EIU está hecha basada en los posibles cambios de la política de visas de Estados Unidos hacia esos países, por lo que no necesariamente refleja realmente la migración. Por ejemplo, según el Pew Research Center, desde la crisis del 2008 el porcentaje de personas mexicanas del total de migrantes pasó del 29% en 2010 al 23% en 2022 y en general desde los 2010 ha habido más ingresos desde Asia que desde América Latina, revertiendo una tendencia de las décadas previas.
Además, Estados Unidos está en un pico histórico de migración, con un 14,3% respecto de la población total, para unos 48 millones de migrantes. De estos, los migrantes ilegales son 11 millones.
Sobre Centroamérica la política estadounidense para la migración de Biden se basó en procurar evitar la migración a través de medidas políticas, pues las medidas represivas las ponía el gobierno mexicano, siguiendo al pie de la letra la política del gobierno de Estados Unidos.
Sin embargo, la imposibilidad de expandir más las operaciones de maquila en las fábricas centroamericanas por parte del capital estadounidense y la necesidad de que el ejército de reserva se desplace a realizar trabajos agrícolas, domésticos, etc. como condición para la valorización y producción de valor del mismo capital estadounidense, crea una contradicción enorme, donde la ubicación geográfica de Estados Unidos con una frontera terrestre enorme inevitablemente atraerá a masas migrantes.
Para detener la migración hacia Estados Unidos desde Centroamérica la condición fundamental es que Estados Unidos abandone su política de expoliación de recursos y explotación de mano obrera barata de los países de Centroamérica, el Caribe y México. Es fundamental que la región puede realizar lo que mejor le convenga sin la intromisión permanente de los gobiernos estadounidenses, cuyo objetivo es mantener a estos pueblos divididos para mejor oprimirnos. |